La Licenciada Patricia Fortina se refirió en la 99.9 a la vacunación contra la fiebre amarilla y los casos en los cuáles se debe aplicar: “a todo el mundo le agarró una locura por vacunarse, pero en el calendario oficial de nuestro país, la vacuna de fiebre amarilla está incluida”, explicó.
El surgimiento de nuevas áreas consideradas zonas de riesgo para la fiebre amarilla en Brasil ha generado una desesperación colectiva por acceder a la vacuna que no es recomendable. Para dar precisiones al respecto, la Licenciada Patricia Fortina habló en la 99.9 sobre los casos en los cuáles se debe recurrir a la aplicación correspondiente.
“Se ha ampliado la zona de riesgo y en estados como Río de Janeiro, San Pablo o Salvador de Bahía piden la vacuna contra la vacuna amarilla. Brasil no es un país que pide la certificación, pero sugiera la vacunación como así también nuestro Ministerio de Salud”, explicó sobre los cambios que se produjeron.
Sin embargo, se han presentado personas que querían vacunarse pero no tenían pensado ir a Brasil: “quienes viajan a la zona sur de Brasil no la necesitan porque no es una zona de riesgo, pero se pueden dar la vacuna igual. En nuestro país no estamos en zona de riesgo por lo que no hay que vacunarse si no van a salir del país”, aclaró.
Respecto de los tiempos para vacunarse, agregó luego que “se debe recibir al menos 10 días antes del viaje, no es necesario darse la vacuna 3 o 4 meses antes. Una sola dosis en la vida y al menos 10 días antes del viaje es la recomendación que se hace”.
Este tipo de noticias generan una rápida reacción de la gente que acude a vacunarse: “a todo el mundo le agarró una locura por vacunarse, pero en el calendario oficial de nuestro país, la vacuna de fiebre amarilla está incluida y se comprobó que con una dosis en la vida está cubierto”.
Respecto de la manera de reconocer los síntomas de esta enfermedad explicó que “inicialmente son inespecíficos como decaímiento, dolor muscular o articular, dolor de cabeza y demás. Puede haber una complicación y ahí es donde aparece la segunda etapa con un mal funcionamiento hepático y el cambio en el color de la piel que le da nombre a la enfermedad”.
Por último, señaló que si no se trata adecuadamente puede generar la muerte: “si hay complicaciones y no se consulta, puede llegar a ser normal por el mal funcionamiento del hígado. En el caso de los niños de menos de un año o mayores de 60 años, no se recomienda la vacuna sino la protección contra los mosquitos”.