La presidenta demócrata de la Cámara de Representantes necesitará contar con el apoyo del vicepresidente para poder aplicarse dicha enmienda. Caso contrario, la iniciativa será sometida a votación dentro del recinto.
Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes, aseguró el pasado domingo que buscará mañana aprobar una resolución en el Congreso para instar al vicepresidente, Mike Pence, a invocar la enmienda 25 de la Constitución para destituir al presidente Donald Trump.
Este lunes por la mañana, Pelosi necesitará contar con una resolución unánime para, de esa manera, proceder con la inhabilitación del presidente por incapacidad para gobernar.
Para ello, el actual vicepresidente deberá ser quien tome la iniciativa, además de contar con el respaldo de la mitad del gabinete presidencial, algo que parece poco probable. En caso de no lograr alcanzar el apoyo necesario, la solicitud será presentada al día siguiente para ser sometida a votación dentro del recinto.
Según declaraciones recabadas por AFP, la presidenta de la Cámara recalcó que “a la hora de proteger nuestra Constitución y nuestra Democracia, actuaremos con urgencia, ya que este Presidente representa una amenaza inminente para ambas”
“A medida que pasan los días, el horror del asalto en marcha a nuestra democracia perpetrado por este Presidente se intensifica y con ello la necesidad inmediata de acción”. continuó Pelosi
Acto seguido, y abriéndose a la posibilidad de un proceso judicial, detalló: “Estamos pidiendo al vicepresidente que responda en 24 horas. Después, procederemos para llevar la legislación para un juicio político al pleno de la Cámara”.
Los demócratas plantearán un cargo por “incitación a la insurrección” en contra del presidente de Estados Unidos para abrir un nuevo juicio político en su contra. El magnate neoyorquino se convertiría entonces en el único mandatario en la historia de EEUU en ser enjuiciado en dos ocasiones.
Mientras tanto, Trump continúa en silencio. Sus cuentas de Twitter y Facebook fueron suspendidas el pasado viernes por, justamente, “riesgo de incitar a la violencia”.
Los republicanos también piden la renuncia
A diez días del final de su mandato, el presidente saliente enfrenta cada vez más llamados para que dimita, también desde el propio campo republicano, con el objetivo de evitar un complejo proceso de destitución que se anuncia inminente aunque con pocas chances de éxito.
Tras los pedidos de los senadores republicanos Ben Sasse y Lisa Murkowski, el senador Pat Toomey afirmó el pasado domingo en CNN que una renuncia del presidente “sería el mejor camino”.
“Lo mejor para la unidad del país sería que dimitiera”, dijo en ABC Adam Kinzinger, legislador en la Cámara de Representantes y primer republicano en pedir que Trump fuese “no apto” para ejercer sus funciones.