El principal sindicato de la policía local denunció que se vive una “situación insurreccional” al cumplirse una nueva jornada de incidentes en París.
“Aux armes citoyens!”, proclama La Marsellesa, el himno nacional de Francia desde los tiempos de la Revolución de 1789, y los ciudadanos tomaron las armas, no contra la tiranía del rey Luis XVI sino contra las medidas económicas del presidente, Emmanuel Macron.
Los disturbios comenzaron hace unas semanas después de que Macron retirara el subsidio a los combustibles, lo que encareció aún más el costo de vida. Los manifestantes vestidos con chalecos amarillos, los “gilets jaunes”, tomaron este sábado la terraza del Arco de Triunfo, en uno de los extremos de la avenida de los Campos Elíseos de París.
En un intento por controlar las protestas, y por proteger los puntos históricos de París, la policía instaló puntos de seguridad, reprimió con gases lacrimógenos a los manifestantes, y arrestó a 270 personas. Hasta el momento hay 110 heridos, entre ellos 17 policías.
Pero, en un extraño caso de cambio de roles, los “chalecos amarillos” la emprendieron contra las fuerzas de seguridad. Por eso la Alianza de la Policía Nacional, el principal sindicato de la policía en Francia, denunció una situación “insurreccional” y exigió la declaración del “estado de emergencia” en el país.
“La Alianza de la Policía Nacional denuncia que la situación esta noche es insurreccional. Las palabras y mensajes de apoyo del ministro de Interior ya no alcanzan. Exigimos la instauración del estado de emergencia. Señores políticos, actúen y rápido”, expresaron desde el sindicato policial en Twitter.
El mensaje fue publicado después de que el primer ministro francés, Edouard Phillip, afirmara que “muy rara vez” se produjeron semejantes enfrentamientos con la policía, que descargó agua desde carros hidrantes a los manifestantes.
“Quiero decir lo mucho que me ha sorprendido este cuestionamiento a los símbolos de Francia: el hecho de que el Arco del Triunfo haya sido marcado, de que alrededor de la tumba del soldado desconocido pudiera tener lugar una manifestación”, expresó.
Para preservar al público ajeno a los enfrentamientos, la policía evacuó y clausuró las famosas Galerías Lafayette, Printemps Haussmann, cerca de la Ópera de París, a unos cinco kilómetros al noreste del Arco del Triunfo.