Adrián Gonzales, de 51 años, fue uno de los primeros agentes en llegar a la primaria Robb. Fue acusado de 29 cargos de abandonar su entrenamiento y no enfrentarse al tirador, Salvador Ramos
Adrián Gonzales, quien se desempeñó como policía escolar de Uvalde, está previsto que comparezca ante el tribunal por primera vez el jueves, tras ser uno de los casi 400 agentes que acudieron al lugar del tiroteo masivo de 2022 en la escuela primaria Robb, que después esperaron más de 70 minutos para enfrentarse al tirador dentro de la escuela.
Gonzales, de 51 años, fue uno de los primeros agentes en llegar al lugar de los hechos. Fue formalmente acusado de 29 cargos que lo acusan de abandonar su entrenamiento y no enfrentarse al tirador, incluso luego de oír disparos mientras estaba en un pasillo.
Nico LaHood, abogado de Gonzales, ha calificado los cargos de “sin precedentes en el estado de Texas”. Según LaHood, quien fue fiscal de distrito del condado de Bexar, la postura del exoficial fue que no violó la política del distrito escolar ni la ley estatal.
Las víctimas del tiroteo, que incluyeron a 19 niños y dos maestras, pedían ayuda mientras los oficiales esperaban afuera del edificio. Los estudiantes se encontraban aterrorizados dentro del aula, llamaron al 911, cuando se producía el tiroteo mientras los padres rogaban a los oficiales que entraran. Un equipo táctico de oficiales finalmente entró al aula y mató al tirador pese a la espera.
Cada cargo contra Gonzales conlleva hasta dos años de cárcel si son condenados. Las familias de las víctimas han estado presionando durante más de dos años para que los agentes se enfrenten a cargos.
El autor del tiroteo, Salvador Ramos, de 18 años, le disparó a su abuela antes de arribar a la Primaria Robb, quien logró sobrevivir. Posteriormente, se encerró en el aula para disparar a los estudiantes y maestras, en su mayoría hispanos.
A pesar de la respuesta tardía de las autoridades, Ramos murió abatido al enfrentarse con la policía en la escuela. Dos de los agentes fueron alcanzados por balas, pero Abbot aseguró que se encuentran en estado estable.