La autoridad monetaria busca evitar otro supermartes y realizó fuertes compras en el mercado secundario. Solo en la jornada de ayer, absorbió títulos por $ 20.000 millones.
En el Banco Central (BCRA) están haciendo todo lo posible para evitar otro “supermartes” de Lebac. A 13 días hábiles de la próxima licitación, la entidad ya recompró $ 53.000 millones en títulos en el mercado secundario. Así, redujo el vencimiento de junio a $ 612.000 millones (contra los $ 617.000 millones que expiraron en mayo).
Ayer fue un día clave para la estrategia de achicar vencimientos, ya que el organismo conducido por Federico Sturzenegger recompró Lebac por $ 20.000 millones, casi la mitad de los $ 53.000 millones que adquirió desde la licitación de mayo. “El BCRA siguió comprando instrumentos a junio en 40% y vendiendo los plazos más largos, tal como venía haciendo. Sin embargo el mercado empezó a operar levemente por encima de esos niveles en los plazos de junio a noviembre”, confirmó Martín Przybylski, portfolio manager de Consultatio Asset Management.
Por ahora el stock de Lebac se mantiene estable por encima del billón de pesos. Sin embargo, en las últimas semanas cayó $ 40.000 millones la cantidad de letras en manos de las entidades financieras, que hoy poseen alrededor de $ 520.000 millones. Esto puede deberse a la relajación en el cómputo de encajes (que ahora será trimestral) y que permite que los bancos compensen más adelante el actual desarme de Lebac.
Factores del desarme
Si bien la recompra es beneficiosa desde el punto de vista de los vencimientos, el otro lado de la ecuación muestra que hay inversores que quieren deshacerse de sus Lebac. Por ejemplo, aquellos que deciden salir del carry trade, es decir, vender tanto sus Lebac como sus coberturas de futuros en dólares y comprar dólares al contado (ver Tapa).
Otra explicación posible para las exitosas recompras de Lebac que está haciendo el BCRA es el desarme estacional de parte de los Fondos Comunes de Inversión (FCI). “Estamos viendo salida de parte de los fondos. A fin de mayo suele descender el patrimonio de los FCI por el pago del impuesto a las ganancias. Es más un tema de ciclo que un cambio desde los plazos cortos hacia los largos”, explicó Diego Falcone, head portfolio manager de Fondos Cohen.
No obstante, para quienes se dejaron seducir por la idea de asegurarse tasas altas por un período mayor, el BCRA también ofreció Lebac en el mercado secundario. En los días posteriores a la licitación del 15 de mayo el organismo vendió letras por unos $ 95.000 millones en plazos de julio en adelante, siempre a tasas de mercado.
Los rendimientos de las Lebac subieron con fuerza desde que el BCRA endureció su política monetaria, a partir de la corrida cambiaria de fines de abril. Las tasas pasaron de niveles cercanos al 26% a los actuales, de 40%. Ayer, las letras pagaron 40%, 40,50%, 38,50%, 38,40%, 38,75% y 38% para los plazos de 21, 48, 76, 111, 139 y 174 días.
Como correlato de la mejora en las tasas de Lebac y la venta de reservas que realizó el BCRA para contener la escalada del tipo de cambio, cayó con fuerza el stock de pases pasivos y Leliq, cuyas tasas quedaron en 33%. Las Leliq, cuyo stock había alcanzado un récord de $ 174.000 millones en abril, hoy solo suman $ 12.000 millones. La cantidad de pases pasivos, en tanto, quedó reducido a unos $ 6000 millones.
Como complemento a su estrategia de descomprimir vencimientos mediante intervenciones en el mercado secundario, el BCRA lanzó “swaps” de Lebac con bancos, es decir, canjes voluntarios de letras a un mes por esos mismos instrumentos a plazos más largos. La operatoria empezó el 23 de mayo y desde ese momento hicieron swaps por $ 1200 millones.