La Secretaría de Comercio informó hoy la prórroga del régimen hasta el 6 de enero de 2017. Los productos se venderán en 2.250 supermercados de todo el país. Las subas promedio son de 2,5%.
El Gobierno prorrogó el Programa Precios Cuidados hasta el 6 de enero de 2017. Dio de baja algunos productos e incorporó otros a esa canasta de consumo que ahora incluye unos 530 productos.
“El aumento promedio de los nuevos artículos estará entre el 2% y el 3%, en tanto que en algunos rubros, como el arroz, la suba llegará a cerca del 8%, y en el azucar, al 12%”, contó a Clarín Juan Vasco Martinez, directivo de la Asociación Supermercados Unidos (ASU).
“Por otro lado, se mantienen los precios de la cebolla, la papa y la manzana, baja 3% el precio de la zanahoria, desaparece el limón del listado y se incorpora la lechuga, a $4,9.”
Además, se mantienen en la lista de Precios Cuidados los actuales cortes de carne con subas del 2% promedio y el pan pasa a costar $28,50 el kilo.
Algunos proveedores fueron dados de baja por dos razones: porque se van por decisión propia porque no podían cumplir con las condiciones de precio y stock requeridas, o bien porque sus reiterados incumplimientos hacen que se los haya tenido que dejar de tener en cuenta en el programa.
El nuevo acuerdo se da en momentos en que las grandes cadenas de supermercados buscan recuperar sus niveles de venta a través de agresivas campañas de ofertas en las que ofrecen a los consumidores comprar tres productos y pagar dos, entre otras estrategias.
La participación de la canasta de Precios Cuidados en la facturación de un supermercado llegó a ser del 10 o 12% en los primeros seis meses de su implementación, durante la gestión kirchnerista.
Con el paso de los meses, y ante la necesidad de contener la suba de los precios -en especial los de consumo masivo, principalmente los alimentos y artículos de limpieza del hogar- el Gobierno nacional volvió a potenciar el programa.
Sin embargo, ahora representan entre 5 y 6% de las ventas totales, estimó Vasco Martinez. No obstante, “es una buena facturación en productos de alta demanda con bajo precio”, explicaron otras fuentes supermercadistas.