Se relevó a más de 45 mil chicos de 6 a 12 años, de colegios públicos y privados. El 42,6% tiene algún tipo de sobrepeso. Además, se detectaron otros problemas de salud vinculados a la mala alimentación: el 30% sufre de caries.
Sobrepeso, caries y dificultades para morder son los principales problemas de salud que sufren los niños que asisten a las escuelas primarias bonaerenses, según un estudio realizado por el Ministerio de Salud provincial. El organismo precisó a Tiempo Argentino que cuatro de cada diez chicos en edad escolar están excedidos de peso.
Los datos surgen del estudio llevado a cabo el año pasado en 949 escuelas merced al Programa de Sanidad Escolar (Prosane): se relevó a más de 45 mil chicos de 6 a 12 años de escuelas públicas, especiales y privadas.
“Y sobre ese total analizamos 17.848 y observamos que el exceso de peso se mantiene como un problema de salud prevalente, una epidemia mundial derivada de la mala dieta y de la falta de actividad física”, explicó a la agencia Télam Luis Crovetto, director provincial de Atención Primaria y responsable del Prosane.
Según el estudio, el 24,2% de los chicos padece exceso de peso, mientras que en el 18,4% de los casos se halló algún nivel de obesidad, según las curvas de medición del crecimiento avaladas por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El ministro de Salud bonaerense, Alejandro Collia, sostuvo que el trabajo del Prosane “no se queda en el mero diagnóstico de las enfermedades. Estamos capacitando a los docentes y hemos elaborado guías para el tratamiento de estos problemas en las aulas y en los hospitales públicos de la provincia”. Collia añadió que los kilos de más “generan mayor riesgo de que un chico desencadene enfermedades metabólicas”, por lo que destacó la importancia de mejorar la dieta consumiendo más frutas y verduras y menos azúcares y grasas, además de generar el hábito de realizar ejercicio físico regularmente desde la infancia.
Desde el Ministerio de Salud de la Nación advirtieron también que sostener una vida sedentaria puede generar con el tiempo obesidad, diabetes, ciertos tipos de cáncer y enfermedades cardiovasculares, entre otras, por lo que recomendaron practicar actividad física “no sólo para prevenir esas afecciones, sino para controlarlas cuando las mismas ya se encuentran instaladas”.
“La práctica regular de actividad física prolonga la vida y mejora la calidad de los años por vivir, reduce el estrés, mejora el estado de ánimo y la salud de los huesos, aumenta la flexibilidad articular, ayuda a mantener la masa muscular que se pierde con la edad, disminuye los valores de colesterol LDL (malo) y triglicéridos, aumenta el colesterol HDL (bueno), y mejora los valores de presión arterial, entre otros beneficios”, detallaron desde la cartera sanitaria nacional.
Por su parte, desde la OMS apuntan que para los niños y jóvenes de 5 a 17 años, la actividad física recomendada consiste en juegos, deportes, desplazamientos, actividades recreativas, educación física o ejercicios programados, en el contexto familiar, escolar o comunitario. “Se recomienda que niños y jóvenes inviertan como mínimo 60 minutos diarios en actividades físicas de intensidad moderada a vigorosa. Eso reportará un beneficio aun mayor para la salud”, señala la entidad. Y advierte: “La actividad física diaria debería ser en su mayor parte aeróbica y convendría incorporar, como mínimo tres veces por semana, actividades vigorosas que refuercen músculos y huesos.” «
Caries y “mala mordida”
Según el estudio de la Prosame, tres de cada diez niños tienen caries y dos de cada diez presentan problemas de oclusión, es decir, no muerden como corresponde. “Las caries conjugan dos causas muy frecuentes en los chicos: falta de higiene y mala alimentación”, explicó Mario Calcaterra, de la Dirección provincial de Salud Bucal, quien precisó que como es prácticamente imposible privar a los chicos de golosinas, es fundamental crearles el hábito de cepillarse los dientes al despertar, después de cada comida y antes de irse a dormir. Sin embargo, aclaró que el cepillado “no es suficiente; hay que incorporar el hilo dental todos los días, pues en los espacios interdentales no hay cabida para el cepillo”.
En cambio, los problemas de oclusión o “mala mordida” no se pueden prevenir. Se recomienda consultar al odontólogo “porque afecta las articulaciones témporo-mandibulares, provoca molestias y un dolor que si no se trata, crece hasta hacerse insoportable”.
Obesidad
18,4% de los chicos evaluados presentan algún nivel de obesidad, según las curvas de medición del crecimiento avaladas por la OMS.