En Río de Janeiro, hubo 4 personas fallecidas por balas perdidas en los últimos nueve días y se ha transformado en un extraño fenómeno.
Una joven de 21 años murió en la noche del domingo (25), víctima de una bala perdida en Río de Janeiro.
Fue alcanzada por el proyectil durante un enfrentamiento entre criminales y policías militares de la UPP de la Rocinha, en São Conrado, en la zona sur de la ciudad.
Con esa muerte subieron a 16 las víctimas por balas perdidas en la región metropolitana de Río de Janeiro en nueve días. Cuatro de ellas murieron.
De acuerdo con la coordinadora de las UPPs, Adriene Solan do Nascimento, baleada en la Rocinha, llegó a ser llevada al hospital, pero no resistió.
En una nota, la Policía Militar (PM) afirmó que los policías estaban haciendo una ronda de rutina cuando fueron sorprendidos a tiros por los criminales.
Esa misma noche, otras tres personas fueron víctimas de balas perdidas en un enfrentamiento entre criminales en Mesquita, Baixada Fluminense.