La empresa TellmeGen, presenta sus mapas de salud ‘online’. Aplica la filosofía de reducción de costes de cadenas de distribución como Mercadona.
“Los genes no te definen, pero ayudan a entenderte”. Con esta premisa, TellmeGen se ha convertido en “la primera empresa europea” que ofrece mapas de salud asequibles al público general. Con una simple muestra de saliva, su chip “único” es capaz de identificar en el ADN “más de 260 ítems de información”, entre los que se encuentra la susceptibilidad a enfermedades poligénicaso complejas, el diagnóstico de enfermedades monogénicas, la información farmacogenética y los rasgos fenotípicos.
Tras cuatro años de estudio previo y análisis, los jóvenes emprendedores de TellmeGen, que cuenta con el apoyo logístico y financiero del programa Lanzadera, impulsada por el presidente de Mercadona, Juan Roig, lanzan ahora al mercado su kit genético que reduce el precio de “los 3.500 euros de media a 275”.
El usuario sólo tiene que poner una muestra de su saliva en el tubo que le llega a casa, volver a enviarlo a la empresa y en 40 días recibe una notificación electrónica de que su mapa de salud ya está disponible ‘online’. Además de la información genética, cada ítem se asocia a las últimas recomendaciones en materia de prevención. También tiene acceso a un foro público donde puede interactuar con profesionales médicos. “Ahora estamos trabajando en un incluir un servicio de consultas individuales con especialistas”, indica el CEO, Ramón Catalá.
“El riesgo a una determinada enfermedad va cambiando con la edad”, comenta el COO, Louis Vallbona. Es por ello que la ‘startup’ valenciana va actualizando la información del paciente con el paso del tiempo. “No ofrecemos una foto fija”.
La clave tecnológica del sistema es el chip de genotipado, que después se analiza en los secuenciadores subcontratados al Instituto de Investigación Sanitaria Incliva, de Valencia. El sistema se basa en la evidencia científica y alcanza “una fiabilidad del 99,99%”. TellmeGen quería abrir los mapas de salud a todas las personas y para ello, su estrategia se ha basado en “ajustar los costes”, una filosofía similar a la que han aplicado cadenas de distribución como Mercadona. “Se pueden ajustar si prevemos grandes ventas”, destaca Catalá.