Las protestas contras las estrictas restricciones por el coronavirus continúan y se extienden por todo el país; al menos tres personas fueron detenidas.
Manifestantes se enfrentaron con la policía en la ciudad de Guangzhou, en el sur de China, desde la noche del martes hasta la mañana del miércoles, según testigos y videos, en medio de una ola de protestas en todo el país contra las restricciones por el coronavirus.
Las imágenes muestran a agentes de seguridad con trajes de protección blancos y escudos antimotines avanzando en una calle del distrito de Haizhu mientras recibían proyectiles de escombros y cristales. También se ven barricadas con objetos azules y anaranjados y se escuchan gritos de manifestantes.
El video da cuenta además de la detención de una decena de hombres que eran llevado con las manos esposadas.
Un habitante de Guangzhou de apellido Chen dijo que observó a unos 100 policías en la aldea Houjiao, en el distrito de Haizhu, donde detuvieron a al menos tres hombres la noche del martes.
Zhang Yi, portavoz de la Comisión Nacional de Salud de Guangzhou, dijo el martes que “la epidemia en el distrito de Tiahne avanza rápidamente, y el riesgo de transmisión social continúa creciendo”.
Haizhu también fue escenario de masivas protestas contras la política de “covid cero” a principios de este mes.
El vasto aparto chino de seguridad fue movilizado rápidamente para contener las protestas contra las estrictas medidas de coronavirus, que tuvieron lugar este fin de semana en muchas ciudades del país, originadas luego de que 10 personas murieran en un incendio de un edificio confinado en Urumqi, en la región noroccidental de Xinjiang. Muchos chinos creen que las prolongadas restricciones de covid contribuyeron a estas muertes.
Manifestantes en grandes urbes como Pekín y Shanghai salieron a las calles para exigir el fin de las restricciones, mientras muchos otros pidieron la dimisión del presidente chino Xi Jinping. Las personas encendieron velas, llevaron flores, y mostraron hojas en blanco para exigir por mayores libertades.
Haizhu, un distrito con más de 1,8 millones de personas, registra la mayoría de los casos de covid-19 en la región. Gran parte de la zona está bajo confinamiento desde finales de octubre.
Semanas atrás, manifestantes en Haizhu traspasaron las barreras de confinamiento y marcharon en las calles, en una explícita muestra del enojo público contras las restricciones sanitarias.
Entre tanto, videos publicados la noche del martes en la red social china Weibo muestran largas filas de tránsito de residentes que intentan salir del distrito de Tianhe para escapar del confinamiento.
“Yo pensaba que esta sería la época más feliz de mi vida (…) Ahora recibo una notificación de emergencia a la 1, termino temblando y llorando en el corredor a las 2 y miro a mis compañeros huir con maletas a las 3. A las 4 estoy sentada sola sobre mi maleta y lloro, esperando que lleguen mis padres”, dijo en Weibo una estudiante a quien le pidieron dejar su dormitorio universitario.
“A las 5 finalmente entro al auto y salgo de este sitio devorador de personas, que ahora es como un infierno”, señaló la estudiante que utiliza el seudónimo de Ludao Lizi en una cuenta verificada de Weibo.
China es la única gran economía del mundo que sigue apostando por una estricta política anticovid para enfrentar los rebrotes del virus, que surgió por primera vez en el año 2020. Las autoridades locales buscan contener los casos positivos con testeos masivos, cuarentenas y cierres repentinos.