El diputado del Frente Renovador, Ramiro Gutiérrez es uno de los impulsores de la ley que elimina en la provincia de Buenos Aires la aplicación del 2×1 pero no sólo para delitos de lesa humanidad, sino para cualquier tipo de fallo. “Tenemos que trabajar mucho en reforzar al Poder Judicial, hay que formarlo mejor y seleccionarlo mejor”, agregó.
El fallo que volvió a aplicar el 2×1 en un caso de condena por delitos de lesa humanidad ha generado la inmediata reacción política al respecto con legisladores que se movieron rápidamente, pero no sólo a nivel nacional, sino también en la Provincia de Buenos Aires y mediante una iniciativa del Frente Renovador.
Uno de los impulsores fue el diputado Ramiro Gutiérrez que habló al respecto en la 99.9: “el Congreso había dictado esta ley que permitía que una persona que había estado detenida, pudiera estar un día detenido y el juez considere que había estado dos. Cuando se promulgó fue porque había una saturación de cárceles y la única solución que encontraron fue abrir las puertas, lo peor que se puede hacer y mucho menos a través de una ficción”.
Sin embargo, cuando parecía un tema fuera de discusión, regresó a la escena pública: “la Corte Suprema echó mano a esa herramienta aún cuando la ley había sido derogada diciendo que sus efectos estaban vivos. Generó el rechazo inmediato y rápidamente el congreso tuvo el reflejo político de juntarse y sacar una ley interpretativa para que este fallo no fijo jurisprudencia. En la provincia, presentamos una ley que tiene media sanción para que no se pueda aplicar esta ley en ningún caso y no sólo en los delitos de lesa humanidad”, remarcó sobre el avance del proyecto que presentaron.
Paralelamente y en referencia a los derechos humanos la aparición de la Comisión Interamericana en el país fue un tema de debate por la posibilidad que tiene o no de revocar o poner en discusión fallos de la justicia argentina. Gutiérrez puntualizó que “como país suscribimos a tratados internacionales que vienen con la posibilidad de que intervengan la Corte Internacional de Derechos Humanos y la mencionada Comisión. En nuestro sistema judicial argentino, el último estamento es la Corte Suprema que no sólo debe hacer un control sobre los fallos para que cumplan con estos tratados. No es que hay una cuarta instancia”.
Lo que expresó también es la necesidad de mejorar el sistema judicial para que de una vez por todas, se agilice el curso de las causas: “tenemos que trabajar mucho en reforzar al Poder Judicial, hay que formarlo mejor y seleccionarlo mejor. No puede ser que un juicio en el país tarde 7 años y hay que trabajarlo. La justicia es de papel y hay que actualizarla”.