El atlas celeste más preciso jamás realizado, con 1.142 millones de estrellas de la Vía Láctea, fue difundido por la Agencia Espacial Europea (ESA) a partir de las observaciones de su telescopio espacial Gaia.
“Es el mapa más grande y preciso jamás realizado” de nuestra galaxia, dijo Anthony Brown, director del centro de procesamiento de datos del proyecto Gaia, en una conferencia de prensa de la ESA desde Madrid.
La mayoría se agrupa en el centro de la imagen. Las manchas negras son nubes de gas y polvo que se interponen entre la cámara de Gaia y otras estrellas del otro lado.
En la parte inferior de la derecha se destacan las nubes de Magallanes, dos galaxias satélites de la nuestra y que solo son visibles en el cielo nocturno del hemisferio sur (para llegar a la mayor de ellas habría que viajar durante más de 150.000 años a la velocidad de la luz).
Unos 450 astrónomos de 25 países participan en este proyecto que complementa los datos recabados hace 23 años por Hipparcos, otra misión astronómica de la ESA.
Lanzado el 19 de diciembre de 2013, el satélite Gaia orbita alrededor de la Tierra mientras observa el espacio dotado de dos telescopios –el secreto de su espectacular precisión– y una cámara fotográfica con una resolución de 1.000 millones de pixeles.
“Gaia está a la vanguardia de la astrometría, mapeando el cielo con una precisión jamás alcanzada”, explicó el español Álvaro Giménez, director científico de la ESA. “La publicación de hoy nos da apenas una primera impresión de la extraordinaria cantidad de datos que nos esperan y que van a revolucionar nuestro conocimiento acerca de cómo las estrellas están distribuídas y se mueven en nuestra galaxia”.
La enorme cantidad de datos que recabó ya permitió elaborar este catálogo con las posiciones de 1.142 millones de estrellas, es decir 200 millones más de lo inicialmente previsto. El objetivo final es completar el mapa celeste en 3D más preciso a la fecha.
A partir de ahora, los astrónomos podrán consultar los datos sobre los distintos cuerpos celestes, incluyendo enanas blancas, estrellas variables y unos 2.152 quasares, los objetos más alejados del Universo.
“Gaia no sólo nos suministra la posición de las estrellas sino también su movimiento, y ello nos permite además comprender mejor cómo se formó nuestra galaxia”, explicó Antonella Vallenari, del observatorio de Padova (Italia).
Por ejemplo, permitirá saber si nuestro Sol se formó a partir de un “clúster”, un cúmulo de materia. La posición y movimiento de unos 400 de estos cúmulos ya fueron registrados por Gaia, precisó Vallenari.
Luego de su lanzamiento hace exactamente 1.000 días, Gaia comenzó su trabajo de observación en julio de 2014. Los datos divulgados este miércoles abarcan los datos registrados en los 14 primeros meses de trabajo, hasta septiembre de 2015.
Se espera además que la información recolectada permita saber más acerca de uno de los grandes enigmas del universo, la materia negra.
Centinela siempre alerta, Gaia también observa el movimiento de los asteroides, en caso de que su trayectoria constituya una amenaza para la Tierra.
Gregory Laughlin, de la Universidad de Yale, asegura que Gaia revelará a la comunidad de astrónomos “miles de nuevos mundos”, aunque todavía debe completar su trabajo de recolección. Su misión de observación astronómica concluirá a fines de 2020.