El Titular de la Asociación Frutihortícola de Productores y Afines de General Pueyrredón señaló en la 99.9 la preocupación del sector por los constantes allanamientos a los productores que lleva a replantear la actividad: “hay muchos productores que están con ganas de abandonar”, dijo al tiempo que advirtió que trabajan por una normalización laboral.
El sector frutihortícola está enfrentando problemas varios que no les permite desarrollarse. Ya se han expresado previamente sobre los inconvenientes que debieron afrontar por factores climáticos sin tener luego acceso al crédito y hace poco hubo una controversia por el mantenimiento de los caminos rurales. Otro de los puntos donde avanzaron y mantuvieron una reunión con funcionarios, es sobre la formalización laboral luego de allanamientos ordenados por el juez Santiago Inchausti donde se acusa sin fundamentos de trabajo esclavo a los dueños de los campos.
En la 99.9, se refirió al tema el Titular de la Asociación Frutihortícola de Productores y Afines de General Pueyrredón Ricardo Velimirovich, señalando que “hace tiempo que venimos trabajando en la normalización, pero ahora nos encontramos con personas detenidas y otras causas donde ni siquiera hay procesados. Hay algunos campos donde siguen haciendo allanamientos todos los meses buscando pruebas de un delito del que los acusan, pero nunca las encuentran. Hay muchos productores que están con ganas de abandonar la actividad”.
En ese sentido, pudieron reunir a los que toman decisiones en un sólo lugar, algo que es poco común porque habitualmente las reuniones se realizan de forma separada: “teníamos presentado hace muchos años un proyecto para los trabajadores que están a porcentaje que es una metodología habitual en todo el país. Queríamos que se junten todos los Ministerios en una reunión para mostrar lo que tenemos y fue muy bien visto. Pudimos hablar con el diputado Aicega porque queremos generar una nueva ley y transparentar este sistema”, adelantó.
El problema judicial también debe ser abordado y lo están penando los productores con justificaciones hasta ofensivas: “hay una malainterpretación de la vida rural y la vida del campo. Cuando uno lee las causas, las declaraciones de lo que llaman como víctimas, indican que como son pobres y bolivianos no son loables sus declaraciones. En la parte rural pone como agravantes la falta de cloacas y gas natural, algo que nadie tiene en el campo. Con ese concepto, estamos esperando a quien le toca nada más”, indicó preocupado.