El embajador habló a través de la 99.9 sobre el protocolo que se ha firmado con Rusia y que, según algunas versiones, implicaría colocar una base de control satelital.
En los últimos días se ha explicitado a partir de artículos periodísticos y algunas versiones en redes sociales que la firma de un protocolo con Rusia derivaría en la instalación de una base de control satelital.
El embajador Roberto García Moritán habló al respecto a través de la 99.9 y advirtió que “he leído sólo información periodística sobre el tema, pero no encuentro que el protocolo firmado con Rusia implique la instalación de una base. Si se hiciera, requeriría la intervención del Congreso de la Nación. El protocolo hace más referencia al sistema ruso que está relacionado con el posicionamiento global”.
La batalla a nivel internacional por la aplicación de distintos sistema de navegación está abierta en el mundo desde hace muchos años y hay distintas herramientas, una de ellas proveniente de Rusia: “el GPS de Estados Unidos se ha convertido en la herramienta de navegación más popular de todo el mundo. Todo comenzó en la Guerra Fría, en los años 60 donde Estados Unidos tenía un programa que se llamaba Omega y con el tiempo se transformó en el GPS que conocemos”. Luego agregó que “la Unión Soviética en aquellos años desarrolló un proyecto similar que era el Glonass que no ha sido demasiado exitoso y es manejado por el Ministerio de Defensa; es un elemento adicional para que el Congreso intervenga”.
Sin embargo, García Moritán insistió en que no parece que el protocolo firmado apunte hacia la colocación de una base: “lo que el protocolo intenta es poner en pie el Glonass. De todas formas, tendría que tener intervención del Congreso porque hay competencia en los sistemas satelitales y todo esto tiene implicancias en el manejo de la información. En el mundo digital estas cuestiones tienen posibilidades mayores de las que estoy comentando. Es un tema complejo”.
Más allá de que esto suceda o no, desde el punto de vista diplomático, para el embajador resulta extraño el momento que se eligió para firmarlo: “me llamó la atención fue el momento porque empieza el nuevo ciclo post pandemia con la nueva administración de Biden que tiene una actitud dura con Moscú. Hay mucha complejidad en la relación entre USA y China pero es algo que resulta provocador en estas circunstancias”.