La antropóloga Rosana Guber habló en la 99.9 sobre los motivos que la llevaron a escribir dos libros relacionados con la Guerra de Malvinas como “¿Por que Malvinas?” y “Experiencia de Halcón”. “Malvinas fue la única guerra del país donde participaron conscriptos civiles bajo bandera o que acababan de cumplir la conscripción. Quería saber que hicimos con ello”, indicó.
Rosana Guber eligió abordar la Guerra de Malvinas desde su mirada de Antropóloga Social escribiendo dos libros, uno casi como inicio de lo que luego derivó. Por un lado, se encargó de redactar “¿Por que Malvinas?” y luego “Experiencia de Halcón”, acerca de la historia de los pilotos de aviones A4B tratando de no llevarlos al extremo bajo el slogan de “ni héroes ni kamikazes: pilotos de A4B”.
En la 99.9 señaló los motivos para meterse en este particular momento de la historia nacional: “me interesaba mostrar las raíces de la causa por la soberanía de Malvinas. Los argentinos tenemos pueblos mezclados y nos queremos poner como si fuéramos puros para un lado o para el otro”. Había un objetivo de fondo por descifrar desde su tarea: “Malvinas fue la única guerra del país donde participaron conscriptos civiles bajo bandera o que acababan de cumplir la conscripción. Quería saber que hicimos con ello”, agregó.
En el medio aparecen muchos matices alrededor de las historias que se cuentan en torno a la guerra: “no es lo mismo opinar sobre Malvinas en el 82 que a fines del 83, como tampoco es lo mismo en 2012 que ahora. Eso no quiere decir que somos veleta, sino que Malvinas es parte de una comunicación, de una relación y depende quienes sean los interlocutores que habitualmente son los gobiernos de turno”.
Guber destacó la relación que todos tenemos con la historia militar del país desde algún punto de vista y también explicó como llega a la historia de estos pilotos que fueron destacados finalmente a nivel internacional: “todos los argentinos tenemos algo que ver con lo militar en cuanto a opinión o experiencia. Todos fuimos atravesados por la lógica militar que no ha sido la misma con el correr de los años. Llego a esta investigación sobre los pilotos de caza de la 5º Brigada Aérea que piloteaban los aviones monoplaza, que era el cazabombardero liviano más antiguo de toda la flota de aviones de Caza a través de Antonio Zelaya que era capitán y jefe de una de las cuadrillas de A4B. Le interesó recuperar su experiencia pero desde la parte humana, él advirtió y yo levanté el guante”, señaló.
Realmente es difícil ser objetivo respecto de las historias que se cuentan y la idea pasaba por llegar a lo que le sucedía al ser humano a bordo de esos aviones que, además no tenían todos la misma edad: “había gente de 23 años y otros que habían pedido prórroga e hicieron la conscripción con 25 o 26 años. Hay que ver la edad aplicada en un avión de cierta complejidad donde hay que tomar decisiones de forma muy veloz. Se debe ver desde otro lugar, no desde el kamikaze como decían los ingleses, ni el de los héroes”, refirió.
Las historias en cada guerra son múltiples desde todo punto de vista y es difícil ver todo el panorama, incluso es prácticamente imposible: “la guerra es un fenómeno netamente humano, no hay otra especie que haga estas cosas. Es muy complejo, porque nadie puede contar todo lo que pasó en una guerra. Es interesante ver como en esa complejidad aparece de todo”. En ese contexto, lo que destaca la antropóloga Rosana Guber es la necesidad de tratar estos temas: “sería muy bueno que se discuta esto y que se lo haga con los veteranos de Malvinas”.