Hace 50 años, en 1964, el director general de Salud Pública estadounidense Luther Terry informó por primera vez en la historia a todos los ciudadanos que fumar mataba, provocaba cáncer y problemas cardíacos.
Terry había realizado el Informe sobre Salud y Tabaco, un estudio de 387 páginas basado en 7.000 artículos científicos. Para muchos expertos, ese informe se convirtió en el documento de salud más importante del país.
Las conclusiones del estudio originaron la creación de una ley federal contra el tabaco más estricta y la obligación de imprimir imágenes de advertencia en las cajetillas, entre otras medidas. Sin embargo, desde entonces hasta hoy el avance no ha sido el deseado, ya que las empresas tabacaleras han presionado constantemente a lo largo de estas cinco décadas.
Desde ese día, un 11 de enero de 1964, el número de fumadores en EE UU ha descendido un 59%, según informa el Centro de Prevención y Control de Enfermedades del país. Un estudio publicado en el Journal of the American Medical Association estima que se han evitado ocho millones de enfermedades prematuras durante ese período. En 1964, el paquete de tabaco costaba 35 centavos, el 42% de la población fumaba en EEUU y unas 300.000 personas morían por su causa cada año.
Hoy en día, se calcula que solo un 18% de la población estadounidense fuma. El precio medio del paquete es de 5,60 dólares, fallecen unas 440.000 personas al año por esta causa y unos ocho millones viven con alguna enfermedad derivada del tabaco.
Los casos de cáncer de pulmón también han bajado con el correr del tiempo. De acuerdo con los datos publicados por el CDC, entre 2005 y 2009 la prevalencia de este tipo de tumor maligno ha descendido en promedio un 2,6% entre los hombres cada año y un 1,1% entre las mujeres. Entre los adultos de 35 a 44 años de edad, ha llegado a descender un 6,5% en los hombres y un 5,8% en las mujeres cada año.
El CDC asegura que fumar provoca cáncer de laringe, pulmón, médula espinal, sangre, esófago, riñones y en más órganos. También incrementa el riesgo de embolia, ataque al corazón y cataratas. Además de dañar al feto y debilitar los huesos, las encías y los dientes.
La ciudad de Nueva York es el mayor ejemplo de la lucha estadounidense contra el tabaco. Para Michael Bloomberg, dejar de fumar ha sido, quizás, lo más importante de su carrera. Logró imponer una de las tasas sobre el tabaco más alta del país, aumentar la edad para comprar el producto a los 21 años y prohibir, incluso, el uso de cigarrillos electrónicos en los mismos lugares que el tabaco normal, entre otras medidas.