El Dr. Julio Hikkilo reveló detalles esta mañana en la 99.9 sobre los avances en la investigación que pesa sobre el intendente Gustavo Pulti por la malversación de fondos afectados. Además, de la significativa cifra pidió que haya “una explicación política porque a los ciudadanos le están pidiendo más dinero para, por ejemplo, las salitas de emergencia en los barrios, pero que termine en saco roto no causa ninguna gracia”.
La investigación que llevaba adelante la justicia de la ciudad en torno a la denuncia que presentó del Dr. Julio Hikkilo sobre la presunta malversación de fondos denunciada en su momento por el concejal José Reinaldo Cano, ha dado un paso más.
El propio abogado contó esta mañana en la 99.9 cuáles son las novedades al respecto: “entre la denuncia del concejal Cano y la negación del oficialismo, buscamos saber cuál era la verdad. Sin embargo, las pruebas superan la realidad porque entre 2012 y 2013 se han desviado fondos afectados por 95 millones de pesos y nos podemos dar cuenta porque están como están los hospitales y las escuelas”.
De ese dinero, una parte fue restituido, pero queda una gran parte que aún no lo se sabe donde fue a parar. “Un perito contador del ministerio público revela esto. Es muy grave y ahora el ejecutivo tendrá que explicar los 62 millones de pesos que todavía no se han restituido. Es un gran esfuerzo ciudadano y debemos saber donde fue esta plata”, reclamó Hikkilo.
Ahora lo que busca es la explicación pertinente del intendente municipal Gustavo Pulti, ya que las pruebas están sobre la mesa. “Si el dinero es desviado para pagar otras cuestiones operativas y corrientes como las que denunció el concejal, es grave. Debe existir una explicación política porque a los ciudadanos le están pidiendo más dinero para, por ejemplo, las salitas de emergencia en los barrios, pero que termine en saco roto no causa ninguna gracia”, aclaró.
Más allá de esperar una respuesta que difícilmente llegue, también se han analizado las posibilidades de encontrar un responsable: “es un delito en el código penal, pero lamentablemente en las leyes de presupuesto se exime de responsabilidad administrativa y penal siempre y cuando esos fondos hayan sido desviados para alguna cuestión excepcional como una inundación. Lo que vemos es que no hubo emergencia, sino que se derivó para otros lugares”.
El único inconveniente que se presentó hasta el momento es que el fiscal no quiere ahondar la investigación: “llegó hasta aquí y dijo que hay una ley de presupuesto que le autoriza a hacer esto, pero vamos a plantear que se siga investigando para saber en que se gastó ese dinero”, anticipó.
Estas reacciones de los actores del poder público tienen que ver también con la presión mediática que representa tener al Fiscal General Fabián Fernández Garello sentado al lado de Pulti en cada conferencia que se realiza. “La justicia debe estar para controlar, investigar y castigar; sin importar quien es el funcionario. Si el fiscal general se sienta al lado del intendente y después los tiene que investigar, el mensaje es confuso. El fiscal debe tomar distancia y hacer su trabajo con el fin de encontrar la verdad. Cuando la política se mete en la justicia, la justicia se va por la ventana”, finalizó Hikkilo.