Se requieren inversiones millonarias para poder ampliar la capacidad de transporte de la energía que se produce con el viento a efectos de poder venderla en los mercados de consumo. En Neuquén hay seis proyectos, uno en funcionamiento y otro avanzado.
Neuquén tiene ocho parques eólicos factibilizados y habilitados con todos los procedimientos para conectarlos al sistema eléctrico nacional que totalizan 1.000 megavatios, un equivalente a lo que puede producir El Chocón, en energía eólica.
Vientos Neuquinos tiene unos 100 megavatios que está funcionando en la zona de Bajada Colorada y Picún Leufú ubicado a unos 20 kilómetros con otros 100 megavatios que está avanzado.
Para los otros seis restantes no “tenemos espacio en el sistema eléctrico nacional porque no se construyeron líneas eléctricas de alta tensión en la Argentina durante mucho tiempo”, dijo el titular de la Agencia de Inversiones, ADI, José Brillo. Una situación que la vivió con cierto dramatismo la producción gasífera de Vaca Muerta.
La ausencia de inversiones para desarrollar los sectores productivos del país no es atribuible a un gobierno, es una constante. En la gestión de Mauricio Macri, el ministro Javier Iguacel creó el Programa de Participación Privada con el que se iban a construir líneas de energía, oleoductos, gasoductos y vías de ferrocarril, que no se hicieron.
“Si hoy tuviéramos esa infraestructura tendríamos un Chocón en energías eólicas, a lo que se le suman los proyectos de la represa Nahueve, los aprovechamientos de Los Guiones en el mismo río y Colo Michi Co en el Neuquén a lo que se agregan los proyectos solares.
Bahía Blanca y Puerto Madryn por su cercanía a los centros de consumo, 300 kilómetros del centro de distribución de Buenos Aires, o por el acceso a las líneas de conducción pudieron desarrollar parques eólicos.
Además de Vientos Neuquinos y Picún Leufú que están en la línea del Limay, se cuentan Loma Jarillosa – a 8 kilómetros de El Chañar yendo hacia Rincón de los Sauces -, en Zapala están Los Pocitos y La Americana, y Cerro Senillosa, arriba de la barda en la localidad.
Se está construyendo una de las pocas líneas de conducción entre la central Alicurá con Bariloche y Villa La Angostura con una millonaria inversión. El Ente Provincial de Energía del Neuquén hizo un ducto subterráneo de 50 kilómetros para conducirla hasta la villa.
El parque eólico de Picún Leufú tiene un contrato por 20 años para vender energía por unos 600 millones de dólares, ya tiene capacidad asignada para inyectar energía. Sería un parque con inversión pública para lo cual se prevé pedir autorización para emitir un título por 200 millones de dólares que se pagarán con la venta de energía. De todas formas -dijo Brillo- un endeudamiento de estas características en un período de transición política es difícil.
La provisión de insumos para la instalación de molinos se encuentra en un buen momento porque las fábricas de aerogeneradores están en el país y más allá de las complicaciones financieras “estamos en una situación buena en cuanto a la provisión de tecnología”, dijo Brillo a radio UNC CALF.
Agregó que se estaba dando una opción en cuento a la importación de aerogeneradores usados desde Europa, más chicos, para instalar parques más chicos como en la costa de Buenos Aires.
Uno de los aspectos que tiene la energía eólica o solar es que se produce cuando hay viento o exposición solar, pero no se puede guardar, por lo que se presenta el litio como uno de los elementos de relevancia para ese objetivo.
En Domuyo hay un proyecto para aprovechar con una central de 5 megavatios la energía geotérmica sería con financiamiento del Banco Interamericano de Desarrollo que estaba apoyando con un fondo no reintegrable que, hasta ahora desembolsó unos 200 mil dólares, pidió una pausa hasta enero.
El parque solar El Alamito está listo para inyectar y se construye una infraestructura para el EPEN: un centro de protección y distribución del sistema eléctrica, un fortalecimiento que casi tiene el mismo valor que el parque, un millón de dólares, que se estima terminar en octubre.
Opción
AES es la concesionaria de Alicurá e hizo Vientos Neuquinos, está cerca, y existe la posibilidad de implementar un sistema que se está desarrollando en los Estados Unidos a los que Bill Gates les llama hidroelétricas reversibles. En esta situación también se encuentra El Chocón con el parque Picún Leufú.
La idea es que con la energía eólica se puede bombear el agua turbinada para volver a ser turbinada a un costo más barata porque el precio de la energía eólica es la mitad, más o menos, que la hidráulica.
Esto se hizo en una decena de centrales en los Estados Unidos. Se puede turbinar varias veces. En el libro de Bill Gates en la página 125 se detalla el plan de hidroeléctricas reversibles.
Reclamo nacional
La Cámara Eólica Argentina presentó un estudio sobre la ampliación en el sistema de transporte, compromisos de descarbonización, metas y resultados económicos: motivos urgentes para acelerar una tarea pendiente.
Escribió que el principal límite que enfrenta hoy un mayor despliegue de la generación renovable es la capacidad de transporte remanente en el sistema eléctrico.
“Ni la Ley ni los compromisos asumidos en la COP 26 han ido de la mano del desarrollo de herramientas concretas para la ampliación del sistema de transporte en alta tensión que sean consistentes con dichas metas”, indicó la cámara y agregó que no se ha logrado articular un esquema que permita trazar metas claras de ampliación del sistema, y mecanismos para pasar de los estudios a planes, de allí́ a licitaciones y a materializar los proyectos.
El sector privado, que ha demostrado en los últimos años que “con un marco normativo claro tiene una decisión concreta de invertir en el desarrollo y construcción de proyectos, podría acompañar o complementar un plan de expansión del sistema de transporte orientado a la incorporación de energía renovable liderado por el Estado Nacional”.
Aclaró que los elevados costos de este tipo de obras, que además redundarían en beneficios para el sistema en su conjunto, implican que no sería posible internalizar plenamente en contratos en el plan de desarrollo renovablecon inversiones tan importantes en transporte a cargo del sector privado.
Aclaró que dentro de los mecanismos existentes para el desarrollo del sistema de transporte en cabeza del sector privado “las ampliaciones por interés público podrían ser una alternativa”.
El sector privado, y en particular la Cámara Eólica, “tiene la vocación de colaborar activamente a fin de que la convergencia de intereses se transforme en proyectos concretos que dinamicen la actividad y permitan cumplir las metas trazadas por el Estado Nacional”.
Actualmente son 58 los parques eólicos en operación en el pais.
Hay proyectos en marcha, tanto de construcción como de ampliación que redundarán en un mayor número de aerogeneradores y, en consecuencia, en una mayor producción energética.
Algunos ejemplos: el Parque Eólico La Elbita, en la provincia de Buenos Aires; el Parque Eólico San Luis Norte, en San Luis, y el Parque Vivoratá, en Buenos Aires; el Parque Eólico Aluar, en Puerto Madryn; y el Parque Eólico Arauco, en La Rioja.
Las dos ventajas del sol y el viento en Neuquén
El secretario de Coordinación del municipio de Neuquén, Alejandro Nicola, informó que la producción de energía renovable es uno de los temas que se fijó la gestión en función del cambio climático.
En la zona de ampliación del ejido de la ciudad que sumó 8 mil a las 12 mil que tenía, donde hay explotación de recursos petroleros, se aprovechó tierra para generar un parque solar.
Se ofreció el proyecto a la Cooperativa CALF para instalar un parque solar, primero con un estudio de prefactibilidad para ver si era posible. Está la reserva de la tierra, unas 100 hectáreas de superficie que permitiría instalar un parque de 50 megavatios de potencia, más o menos un cuarto del consumo de potencia que tiene la ciudad de Neuquén en el pico de demanda.
El primer estudio del recurso “dio que tenía muy buenas condiciones” en cuanto a la intensidad del sol, las características del viento, de humedad, la presencia de polvo, etc. Después -precisó- se hizo un análisis tecnológico en relación con los paneles, los sistemas de soporte y “en este momento se están haciendo los estudios del suelo para hincar los soportes de los paneles”.
Se analiza también cómo se incorpora esta energía al sistema. “Esta etapa ya está estudiada y se complementa el estudio para el desarrollo de toda la zona que tiene previsto instalar parques industriales y 8 000 lotes con servicio”.
Una vez que se tengan los estudios terminados, se tienen que cuantificar los costos para salir a buscar inversores.
Nicola indicó que siempre se pensó en la energía solar para incentivar y no en la eólica y puso en juego su conocimiento en la materia para afirmar que “tenemos más potencial solar que eólico en la zona”.
En el estudio preliminar que se hizo, la zona fue comparada con San Juan que es una de las mejores del país en cuanto a la radiación solar. La provincia cuyana tiene el equivalente a la totalidad de la demanda con energía solar. “Tenemos menos radiación pero las características de temperatura y el viento hace que el rendimiento de los paneles sea mejor porque la brisa que corre limpia el panel, cosa que no pasa en San Juan”, describió.
El polvo baja el rendimiento de los paneles porque hace que no aproveche la radiación. En San Juan los tienen que limpiar, en cambio en la zona, la brisa hace que el polvo no pegado se corre.