El analista internacional Sebastián Maril explicó en la 99.9 los alcances de la reciente audiencia en la Corte de Apelaciones de Estados Unidos por la demanda del estudio Burford contra la Argentina. Aunque advirtió que el país aún no logró revertir su situación, destacó que por primera vez hay una señal favorable dentro del proceso.

El analista internacional Sebastián Maril analizó en la 99.9 la situación judicial de la Argentina en el caso YPF, que se tramita en los tribunales de Estados Unidos, y aclaró el verdadero alcance de lo ocurrido en la reciente audiencia ante la Corte de Apelaciones. “Argentina viene perdiendo en los últimos 10 años de juicio, 8 a 0. Lo que ocurrió el miércoles fue que nos cobraron un penal a favor; no metimos gol todavía. Ese penal puede valer ocho goles”, explicó.
Maril precisó que, a pesar de las interpretaciones optimistas publicadas por algunos medios nacionales, lo sucedido no significa un cambio de tendencia definitivo: “Un juez de los tres mencionó que el juicio podría haberse llevado adelante en Argentina, pero hay que entender el contexto. Los jueces en una apelación no muestran sus cartas, buscan desafiar a las partes. En los últimos 35 años, la Corte de Apelaciones nunca revirtió un fallo diciendo que una corte extranjera era más apropiada que una norteamericana. No digo que no pueda ocurrir, pero hay que ponerlo en perspectiva”.
Respecto a la posibilidad de un acuerdo, el analista fue claro: “Esto se va a cerrar con un acuerdo. Está claro que si Argentina pierde, nunca va a pagar 18 mil millones de dólares. Burford quiere negociar ahora antes de que los costos sigan subiendo, pero Argentina siente que tiene una oportunidad y no se va a sentar a negociar en este momento”.
Maril también se refirió al movimiento financiero del Tesoro norteamericano que generó repercusión local: “Esta semana se conocerá el balance mensual del Tesoro, donde debería verse su posición en pesos argentinos. Ellos tienen euros, yenes y dólares, pero no monedas tan devaluadas como la nuestra. Veremos cuál es la exposición al cierre de octubre”.
Consultado sobre el impacto político de estos movimientos en el escenario electoral argentino, sostuvo que su efecto fue limitado: “Para Estados Unidos es el 0,001% del PBI. Para nosotros fue importante, pero no creo que haya influido en el voto. Los argentinos votaron por miedo, y el resultado final fue exactamente el que preveían las encuestas antes de la caída de la provincia de Buenos Aires. No fue una sorpresa: el problema fue que las expectativas estaban tan bajas que pensamos que había sido un golazo de Milei, pero era un resultado esperado”.
De esta manera, Maril llamó a interpretar con cautela los avances judiciales del país en el exterior: un paso positivo, pero lejos todavía de un fallo favorable o un cierre definitivo del caso YPF.