La directora de la Escuela Provincial Nº45, Karina Cabrera, indicó esta mañana en la 99.9 que después del saqueo y el incendio que sufrieron durante el fin de semana largo, el establecimiento quedó devastado. “Se llevaron todo de la cocina. Hasta el freezer donde guardamos la comida para los chicos. Quemaron todo el mobiliario. Necesitamos la ayuda de la comunidad”, señaló.
La Escuela Provincial Nº 45 sufrió un hecho de bandalismo poco habitual en las últimas horas. Aprovechando el fin de semana largo, un grupo de delincuentes robó todos los elementos de la cocina e incendió siete aulas; cuatro quedaron completamente destruidas.
Esta mañana en la 99.9, la directora del establecimiento, Karina Cabrera, indicó que “los delincuentes han tenido mucha malicia. No es solamente por lo que nos robaron. Desde diciembre hasta la fecha hemos tenido 7 hechos de robo, pero éste último ha sido con maldad. Fueron contra la escuela y contra los chicos. Me saquearon todo lo del comedor, no hay nada para darle de comer a los alumnos. Literalmente, destruyeron la escuela”.
A pesar de que el colegio tiene un sistema de alarma, los delincuentes consiguieron anularla y moverse con total tranquilidad. “Fue el martes a la madrugada; la escuela cuenta con una alarma por monitoreo. El sábado ya nos habían cortado el teléfono, desactivaron todo, sacaron los sensores y la desarmaron. Después empezaron a prender fuego. Un vecino llamó a la Policía. Llegaron los bomberos y después fue terrible el impacto”, especificó Cabrera.
En una de las aulas devastadas por el fuego se pudo ver la sigla “LPSM” que, según la propia directora, quiere decir “Los Pibes del San Martín”, barrio cercano al colegio. De todas maneras, desestimó que se trate de los responsables del hecho: “creemos que están inculpando a otro grupo, no creemos que quienes hicieron esto fueran a identificarse, es absurdo. Todo está en manos de la Justicia”.
Entre lo que han quemado y lo que se han llevado, hicieron un verdadero desastre: “se llevaron el freezer de la escuela, que era lo único que teníamos para conservar los alimentos, junto con la procesadora y todos los utensilios que se utilizan para cocinar. Todo lo que es platos y cubiertos, también. Nos quemaron todo el mobiliario de cuatro salones. Si queremos reanudar las clases, no tenemos nada”.
En ese sentido y teniendo en cuenta que necesitarán el apoyo de los vecinos de la zona, Karina Cabrera afirmó que “estamos apelando a la comunidad. Aquellos que tengan una mesa, aunque no sea un pupitre sino una silla cualquiera, todo es bienvenido. Incluso tenemos vehículo para ir a buscar las cosas. Los teléfonos son 482-4659 y 482-1745”. Luego agregó: “también necesitamos pintura. La idea es reanudar las clases lo antes posible, pero necesitamos tener esas aulas y necesitamos, en carácter de urgente, tanto la pintura como el mobiliario”.
Lo que es realmente algo inusual, para algunos sectores de Mar del Plata termina siendo natural y cotidiano: “estamos acostumbrados a los saqueos, pero no a esta destrucción. El bombero nos dijo que teníamos que ver el vaso tres cuarto lleno, porque tenemos toda la escuela con machimbre y si llegaba a prender eso, podían explotar los calefactores. Es increíble, encima tenemos que agradecer que la sacamos barata”.