Sólo en Concordia unas 600 personas debieron dejar ayer sus hogares por el desborde del Uruguay.
La incesante crecida de los ríos Paraná y Uruguay, que se viene registrando desde hace más de una semana por efecto de las lluvias en el noreste argentino, Paraguay y sur de Brasil, ha puesto en estado de alerta toda la región del litoral. En Chaco, Corrientes y Entre Ríos suman más de un millar las personas que debieron dejar sus hogares para ponerse a resguardo del agua; y en el norte santafesino la altura del primero de los cauces superaba ayer el nivel de evacuación.
En la ciudad entrerriana de Concordia, una de las más afectadas, unas seiscientas personas tuvieron que ser trasladadas de sus hogares a refugios cercanos o se auto evacuaron después de que las aguas del río Uruguay sobrepasaran la cota de seguridad.
Frente al puerto de Concordia, “el río tiene ya una altura de 13,06 metros, lo que supera largamente el nivel de evacuación, fijado en 12,50 metros”, explicaron ayer voceros de la dirección provincial de Defensa Civil.
Debido a la crecida de las aguas, en esa ciudad se habilitaron cinco refugios que alojaban hasta anoche a unas cincuenta familias, pero habría otro centenar de ellas que abandonaron sus viviendas en forma particular y se auto evacuaron en casas de familiares y amigos, según detalló ayer el organismo provincial.
Para evitar que el desborde del río sea aun mayor, “la represa hidroeléctrica de Salto Grande, situada 15 kilómetros al norte de Concordia, se ha visto obligada a regular paulatinamente las compuertas para contener el caudal de agua que viene de la cuenca altar”, explicó el secretario de Desarrollo Humano de la Municipalidad Concordia, Guillermo Echenause.
Unos kilómetros al sur de Concordia, en Colón, el río Uruguay tenía ayer una altura de 8,18 metros, 28 centímetros más que la marca que dispara la etapa de evacuación. Sin embargo, en esta localidad del oriente entrerriano no se reportaban hasta anoche pobladores evacuados.
No así en Concepción del Uruguay, donde el río superaba ayer por veinte centímetros el nivel crítico, y poco más de medio centenar de personas debieron ser asistidas por las autoridades de la ciudad.
La costa occidental de Entre Ríos también está sufriendo la creciente del río Paraná, que en el puerto de La Paz, tenía ayer una altura de 5,98 metros, apenas 15 centímetros por debajo del punto de evacuación. Y en la capital entrerriana; el nivel del cauce, con 4,77 metros, ya había superado el punto de alerta para acercarse al de evacuación.
DESDE LA SEMANA PASADA
Los nuevos evacuados en Entre Ríos vienen a sumarse a las cerca de 300 familias que se encuentran en esta situación desde la semana pasada en la ciudad de Barranqueras, Chaco, donde se teme que la situación pueda continuar agravándose debido a incesante crecida del Paraná
También en la provincia de Corrientes, la capital homónima se encuentra “complicada”, según informó la Prefectura Naval Argentina a través de un comunicado en el que dio recomendaciones especiales a navegantes, bañistas y vecinos.
Y lo mismo en Reconquista, Santa Fe, donde el río superaba ayer en treinta centímetros el nivel de evacuación y las autoridades locales trabajaban para aumentar las defensas con bolsas de arena a fin de evitar el traslado de unas 800 familias cuyas viviendas se encuentran en riesgo.
Como se ha dicho, la crecida natural de los ríos propia de este mes ha tenido como agravante las intensas lluvias registradas en el sur de Brasil, Paraguay y el noroeste argentino, una situación que podría extenderse a lo largo del verano. Y es que según prevé el Servicio Meteorológico Nacional, la presencia del fenómenos de El Niño provocaría hasta fines de febrero un aumento de las precipitaciones por encima de la media en toda esa región.