Luego de la detención y esclarecimiento de los hechos de violencia sexual ocurridos esta semana en Mar del plata, dos acciones de las fuerzas de seguridad dieron resultados concretos en términos de enfrentar el delito en la ciudad.
El primero de ellos permitió desbaratar el accionar de un grupo que se dedicaba a robar y desguazar vehículos de la marca Peugeot del modelo 505.
Efectivos de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI), con personal de la Secretaría de Seguridad Municipal, realizaron un allanamiento que arrojó el secuestro de 4 autos y un detenido.
El procedimiento se llevó a cabo en el barrio Hipódromo, en la calle 20 entre 5 y 7, donde el que los efectivos policiales detectaron 2 autos con pedido de secuestro activo y 2 adulterados. El lugar se trataba de un taller clandestino que funcionaba a puertas cerradas y utilizaba un predio lindero para efectuar las maniobras delictivas.
La particularidad del caso es que el malviviente se dedicaba exclusivamente a la sustracción y posterior adulteración de vehículos marca Peugeot modelo 505, sobre los que realizaba sus operaciones ilícitas. Una de ellas era emplear la identidad de un auto, modalidad conocida en la jerga como “auto mellizo” otra era cambiar las carrocerías “poncho” o simplemente utilizar los motores o piezas de los autos robados y colocárselas en otros vehículos. Lamentablemente, la fiscalía interviniente le endilgó al único detenido, un hombre de 48 años, la figura de “encubrimiento”, un concepto procesal que le asegura su pronta excarcelación.
En otro procedimiento, drogas peligrosas desbarató el accionar de una organización familiar que en pleno centro comercial de calle Güemes vendía drogas a vista y paciencia de toda la comunidad. Los investigadores comenzaron a realizar discretas tareas de inteligencia sobre el domicilio sindicado, pudiendo establecer por las maniobras y movimientos existentes en el lugar que, efectivamente, se estarían comercializando estupefacientes. Con el avance de la investigación , pudieron establecer que el investigado, si bien realizaba ventas al menudeo a clientes ocasionales que acudían a la parte delantera de la vivienda, él mismo también abastecía de drogas en grandes cantidades a otros sujetos; quienes posteriormente comercializaban dichas sustancias en la zona de Playa Grande y en la conocida “Plaza del Agua” de esta ciudad, situada a escasas dos cuadras del domicilio del principal investigado, y a la vuelta de un establecimiento educativo. Por otra parte, también se pudo determinar que en dicho “negocio” se encontraban implicados el hermano del investigado, su cuñada, como así también la progenitora de estos quien, más allá de no poseer un rol especifico en la organización, se hallaba en conocimiento de las maniobras realizadas por sus hijos en la vivienda.
Ante todo ello, se solicitó al Juzgado de Garantías interviniente las correspondientes órdenes de allanamiento, las cuales en el día de ayer y en horas de la noche se hicieron efectivas, logrando en el interior de los domicilios, el secuestro de dos medios ladrillos compactados de marihuana, trozos más pequeños ya fraccionados de la misma sustancia para la venta, un frasco conteniendo “flores o cogollos” de marihuana, cigarrillos armados, pastillas de éxtasis, más de una treintena dosis de LSD (ácido lisérgico), varias bochitas de cocaína, elementos de corte y fraccionamiento como tijeras y cuchillas, balanza de precisión, dinero en efectivo, anotaciones varias y teléfonos celulares. En dicho domicilio lograron la aprehensión del principal investigado como así también del hermano y cuñada, por infracción a la Ley de Drogas. A disposición del magistrado interviniente quedando los mismos, alojados en la UP 44. Acciones concretas. Lejos del discurso, y cerca de los reclamos de los vecinos de la ciudad.