El magnate George Soros y su Open Society Foundations se han vuelto protagonistas de la legalización de la marihuana en Uruguay.
El hombre de 83 años fue nombrado en el debate sobre el cannabis en Uruguay, tras conocerse que Open Society financió una campaña a favor de la ley que convirtió a ese país en el primero en legalizar el comercio de la droga. Soros se reunió en septiembre con el presidente uruguayo, José Mujica, para discutir su iniciativa respecto a la marihuana.
“Como él tiene influencia en algunas ONG importantes, estuvo colaborando y va a seguir colaborando en eso”, declaró Mujica al finalizar ese encuentro en Nueva York.
Open Society financia también grupos que impulsan cambios en la estrategia sobre cannabis en la región y Estados Unidos, incluida la Comisión Global sobre Política de Drogas que integran los expresidentes Fernando Henrique Cardoso (Brasil), Ernesto Zedillo (México) y César Gaviria (Colombia), entre otras personalidades.
“Open Society ha sido un actor muy clave dando apoyo a grupos de la sociedad civil que buscan promover una apertura” en la política de drogas, le dijo a BBC Mundo John Walsh, un experto de la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA), que también recibe donaciones de la fundación de Soros.
Soros dejó su país tras sobrevivir a la batalla de Budapest entre tropas alemanas y soviéticas. Se instaló en EE.UU. y comenzó a hacer fortuna con sus fondos de inversión. A partir de ahí comenzó a financiar proyectos de apertura en países de la antigua Unión Soviética y en otras partes del mundo.
Pedro Abramovay, que hoy dirige los trabajos de Open Society en América Latina, indicó que además de la política de drogas su equipo trabaja en temas como derechos humanos, transparencia y migración.
“El punto es que con las drogas tal vez seamos uno de los únicos”, le dijo Abramovay a BBC Mundo. “No podemos hablar de derechos humanos sin cuestionar la guerra a las drogas”, aseguró. “Soy director y responsable para la estrategia de Open Society en América Latina y no sé absolutamente nada de los negocios de Soros”, afirmó Abramovay. “Nunca he recibido ningún tipo de presión ni dirección que venga de la parte de los negocios”.
“No podemos hablar de derechos humanos sin cuestionar la guerra a las drogas”, dice Pedro Abramovay, exsecretario de Justicia de Brasil.
Open Society invierte unos US$34 millones en América Latina y el 10% de ese total se destina a la temática de las drogas, financiando organizaciones que impulsan cambios de política y tejiendo contactos entre ellas, informó su director regional.
En EE.UU., uno de los grupos que recibe ayuda de la fundación de Soros es la Drug Policy Alliance, que impulsó la legalización de la marihuana en Colorado y Washington y envió una experta a Uruguay durante el trámite de la ley.
“No sabemos cuál es el mejor tratamiento, tenemos que experimentar y Uruguay es uno de los países experimentando”, declaró Soros tras su reunión con Mujica. “Queremos reducir el daño causado por las drogas y la guerra a las drogas”.