“Sufrimos las consecuencias de la inactividad del Rectorado”

El presidente del Centro de Estudiantes en la Faculta de Humanidades, Gastón Díaz, se refirió esta mañana en la 99.9 a la toma del Rectorado. “Se nos cayó el techo en el aula de Sociología”, indicó. Además, describió cómo son los espacios donde cursan: “cursábamos en la sede de Luz y Fuerza, que era alquilada. Es una cancha vieja de Fútbol 5 que está separada en Durlock, y se construyeron cinco aulas de esa forma”.

Universidad Nacional de Mar del PlataLos conflictos con el rectorado de la Universidad Nacional de Mar del Plata, continúan. Hace poco, el foco estaba puesto en el Colegio Illia. Por estas horas, la atención se concentra en la Facultad de Humanidades, específicamente en la carrera de Sociología, que enfrenta problemas edilicios importantes.
Esta mañana, habló en la 99.9 Gastón Díaz, presidente del Centro de Estudiantes de dicha facultad, y explicó por qué decidieron tomar el Rectorado desde el miércoles a las 3 de la tarde: “es la consecuencia de las condiciones de infraestructura en las que cursamos los estudiantes de Sociología. Hace un año que hacemos trámites institucionales y académicos para el cambio de las condiciones edilicias, pero sufrimos las consecuencias de la inactividad del Rectorado”.
El punto límite se produjo cuando se cayó el techo de una de las aulas que estaban utilizando: “tuvimos varios días sin clases, nos organizamos en asamblea y pedimos una mesa tripartita donde estuvieran el Rectorado, la gestión de Humanidades y representantes estudiantiles. Ahí expusimos nuestras tres exigencias: que se garanticen las cursadas hasta terminar el cuatrimestre de manera ordenada, que para el segundo cuatrimestre haya cinco aulas de Humanidades, y que se siente en una mesa a charlar con nosotros el rector Morea”. Sin embargo, el responsable de la Universidad todavía no apareció.
Desde la reapertura de la carrera de Sociología en 2007, las condiciones de cursada nunca fueron óptimas. Por eso, los alumnos piden que se solucionen las cuestiones de fondo para continuar estudiando. “Cursábamos antes en la sede de Luz y Fuerza, que era alquilada. Es una cancha vieja de Fútbol 5 que está separada en Durlock, y se construyeron cinco aulas de esa forma. Ya había hongos en las paredes, goteras e inconvenientes para estudiantes con problemas de motrices. Habíamos pautado una segunda mesa tripartita, pero cuando vinimos el miércoles no había ninguna autoridad de Humanidades. Entonces, decidimos tomar el rectorado”, contó Díaz.
Aunque no se han quedado sin clases, han tenido que improvisar para poder continuar: “la Secretaría de Obras nos quiso llevar de nuevo a Luz y Fuerza, pero los mismos profesores, alumnos y trabajadores se negaron. Hemos tenido clases parciales en el café de la Terminal, por ejemplo. Estamos teniendo clases en un gremio prestado, que es ADUM, pero hasta hoy”.
La toma seguirá. Al menos, hasta que el rector brinde soluciones o se presente a dialogar con los estudiantes: “queremos levantar la toma, pero entendemos que debemos tener esa reunión con el rector para cursar bien en el segundo cuatrimestre. Queremos que se escuchen nuestras necesidades y derechos, que es estudiar en condiciones dignas”.