Según informa el diario Miami Herald, tras consultar distintas fuentes de la policía, el agente Jorge Mercado fue suspendido por tres días con goce de sueldo. El integrante de la policía de Miami Beach fue quien disparó el Taser que causó la muerte del colombiano de 18 años, Israel Hernández-Llach.
Tras haberse dado a conocer el hecho, esta es la primera medida oficial que ha tomado el Departamento de la Policía de Miami Beach en contra de uno de sus agentes.
La Unión para la Defensa de las Libertades Civiles (ACLU) de la Florida hizo una declaración, criticó al Departamento y exigió una extensa investigación.
“Este es el último en una larga y trágica serie de incidentes en los cuales el Departamento de la Policía de Miami Beach parece haber usado fuerza excesiva, desproporcionada o letal”, dice la declaración de la ACLU. “Desafortunadamente, la policía de Miami Beach también tiene un historial inquietante de falta de transparencia después de tales incidentes”.
Según la policía, el oficial Mercado le disparó una vez a Hernández-Llach en el pecho con el Taser. El joven colombiano fue trasladado al hospital Mt. Sinai, donde fue declarado muerto.
La familia de Hernández-Llach acusa a la policía de haber utilizado fuerza excesiva en contra del joven, y dos amigos del muchacho, que son testigos del hecho, dicen que los policías estaban riéndose y dándose palmadas y felicitaciones, mientras Hernández-Llach estaba en el piso.
Mercado es agente de la policía de Miami Beach hace más de 13 años. Ha recibido acusaciones de mala conducta, por uso excesivo de la fuerza y agresión física. Pero estas no fueron de importante en las investigaciones internas de la policía.
El pasado martes 6 de agosto, Félix Fernández vio a su amigo Israel Hernández-Llach tirado en el piso junto a un banco en la esquina de la calle 71 y la avenida Harding, en Miami Beach. “Estaba tieso, acostado boca abajo, sin movimiento”, dijo Fernández a El Nuevo Herald y rodeado de policías.
Fernández dice que los agentes se reían y hacían chistes acerca de haber atrapado al joven, quien estaba pintando un graffiti cuando fue visto por la policía. Como su amigo no se movía, Fernández preguntó a los oficiales que ocurría, hasta que ellos le respondieron, “está muerto”.
Esta versión se contradice con el reporte de la policía de Miami Beach que dice que el joven de 18 años murió luego de ser transportado al hospital Mt. Sinai.
Lo que se sabe con certeza es que, antes del amanecer del martes, Hernández-Llach estaba pintando un graffiti en la avenida Collins con la calle 71 cuando lo vio la policía, y empezó una persecución a pie, hasta que uno de ellos utilizó un Taser contra el joven, quien murió un rato después.