El director del Instituto Promocional Argentino (IPA), Mauro Palumbo, habló esta mañana en la 99.9 sobre la incidencia del factor cultural en la inseguridad reinante. “Somos una sociedad disociada”, afirmó. Además, insistió en que la gente “pide que se junten los políticos y lo traten el tema en serio”.
La inseguridad sigue en el tope de la preocupación para los marplatenses en particular y para los argentinos en general. Puntualmente en Mar del Plata, los cambios en la Secretaría de Seguridad no parece ser la solución definitiva para un tema que necesita un análisis más profundo.
Así lo afirmó esta mañana el director del Instituto Promocional Argentino (IPA), Mauro Palumbo, quien declaró en la 99.9 que “lo que pide la gente es que los políticos se junten y traten este tema en serio, no que hagan cosas hoy y en tres días todo vuelva a ser igual. La gente busca una solución de fondo e insiste en la puerta giratoria de la justicia”.
Más allá de la llegada de “Manino” Iriart, es difícil que la situación cambie rutilantemente de un día para el otro: “hay fallas dentro de la justicia, están juzgando en una fiscalía a una persona y tiene causas abiertas en otras dentro del mismo Departamento Judicial. Es un tema muy grave, muy espinoso y la solución es muy difícil. Estas soluciones semi mágicas tipo Rambo no creo que tenga resultados”, afirmó.
El sistema judicial que tiene nuestro país, es el que genera los principales problemas, además de una sociedad que no se une en el reclamo generalizado. “Somos una sociedad disociada. Con el tiempo, los juristas se darán cuenta el mal que nos hizo Zaffaroni con su ideología sobre el delito. A mí esa teoría no me gusta para nada”.
Los menores y el delito es un tema particular donde hay mucha controversia, pero siguen llevando adelante actos aberrantes. Pero el problema social detrás de ese síntoma es mucho más grave: “en el rubro observaciones de nuestras encuestas te ponen anécdotas y un chico de 19 años puso que se había comprado un auto y lo había sacado en cuotas. A los tres días se lo robaron y después lo llamaron de la comisaría diciendo que lo habían recuperado. Cuando lo van a buscar estaba el padre del delincuente que tenía 14 años y el chico con el padre que cuando vio el auto todo chocado se puso a llorar. El padre del ladrón le dijo “para que llorás, ¿lo querías? Ahí lo tenés”. Que respuesta se puede dar a un padre así”, ejemplificó Palumbo.
Por último, se refirió al régimen de planes sociales y al desmanejo cultural que hay: “hay gente que rechaza los planes sociales, pero es deplorable la cola que hay hoy con el tema garrafas y demás mientras los empleados están adentro charlando como si nada. Tenemos un problema cultural muy serio y todos tenemos nuestra culpa”, opinó.