A diferencia de propuestas anteriores que contemplaban una planta en Sierra Grande para procesar gas de Vaca Muerta, esta iniciativa se centrará en la cuenca austral, destacando a Tierra del Fuego como el nuevo proveedor clave. La reorientación se dio tras la salida de la empresa Petronas, que originalmente impulsaba la planta en Sierra Grande.
Según Horacio Marín, CEO de YPF, “pese a la salida de Petronas, el interés en el proyecto de Argentina LNG es fuerte, con la meta de exportar unos US$15.000 millones en gas para 2030.”
El Hilli Episeyo, con 294 metros de largo y capacidad para procesar 11,5 millones de metros cúbicos de gas por día, será reacondicionado en Reino Unido y se espera su llegada a las costas argentinas entre 2026 y 2027. Este buque reducirá 600 veces el volumen del gas en su estado natural para convertirlo en gas natural licuado (GNL), apto para exportación. Las condiciones marítimas y logísticas del Golfo San Matías, semejantes a las del puerto de Kribi en Camerún, donde el Hilli Episeyo ha operado exitosamente, fueron determinantes para la elección de esta ubicación.
El gas provendrá de Tierra del Fuego a través del gasoducto San Martín, que transporta el gas extraído por Total Austral y un consorcio liderado por YPF, Equinor y Shell. Se construirá un ramal adicional de 15 kilómetros, con 7 kilómetros bajo el mar, que conectará el gasoducto con el Golfo San Matías. Además, el puerto de San Antonio Este será adaptado para las operaciones de apoyo, creando alrededor de 100 empleos y movilizando embarcaciones para el transporte de GNL. El propio Hilli Episeyo generará 170 empleos directos para su operación continua.
Este innovador proyecto no solo refuerza la capacidad exportadora de Argentina, sino que posiciona a Tierra del Fuego como un proveedor estratégico en el mercado de gas natural licuado, consolidando el Golfo San Matías como un pilar para el crecimiento energético del país y su proyección internacional.