El conglomerado industrial japonés Toshiba declaró este miércoles que dejará de construir nuevas centrales eléctricas de carbón, una vez terminados los pedidos en curso, y dará prioridad a las energías renovables.
“Todavía tenemos proyectos en curso, pero hemos decidido retirarnos de la construcción de nuevas centrales eléctricas de carbón”, dijo a la AFP una portavoz de Toshiba, confirmando la información del diario económico Nikkei.
El grupo tiene unos diez proyectos en curso para nuevas centrales eléctricas de carbón en todo el mundo, y es uno de los principales actores en este mercado.
Toshiba aumentará las inversiones en energías renovables -como la eólica marina- y en la investigación y el desarrollo de células fotovoltaicas de nueva generación, agregó la portavoz.
Este anuncio se produce cuando el gobierno japonés estableció en octubre un objetivo de neutralidad carbono para el país para 2050.
Japón, la tercera economía mundial detrás de Estados Unidos y China, fue el quinto país emisor de gases de efecto invernadero en 2018, según la organización Global Carbon Project.
El archipiélago japonés todavía depende mucho de los combustibles fósiles: produce el 38% de la electricidad con gas natural licuado (GNL) y casi el 32% con carbón. Limita la energía nuclear desde la catástrofe de Fukushima en 2011.
Antes de Toshiba, su compatriota Mitsubishi Heavy Industries también anunció recientemente que reduciría su área de carbón para centrarse en las energías renovables.
Y competidores internacionales como la alemana Siemens y la estadounidense General Electric han anunciado planes similares en los últimos meses.