Ucrania reclamará a Rusia 300.000 millones de dólares en reparaciones

Kiev aspira a lograr que la Asamblea General de Naciones Unidas apruebe una resolución que siente las bases de un mecanismo internacional de compensación.

El ministro de Justicia de Ucrania, Denis Maliuska, afirmó este viernes que Ucrania exigirá a Rusia 300.000 millones de dólares en concepto de reparaciones de guerra, una cantidad que se corresponde con los fondos del Banco Nacional Ruso congelados como parte de las sanciones contra Moscú.

Kiev aspira a lograr que la Asamblea General de Naciones Unidas apruebe una resolución que siente las bases de un mecanismo internacional de compensación, dijo el ministro, que visita desde el jueves Berlín.

“Queremos una compensación para todos los daños que Rusia ha ocasionado a Ucrania a través de su guerra de agresión,” declaró Maliuska en una entrevista a los diarios del grupo de medios Funke.

El ministro afirmó que los perjuicios directos causados por la destrucción de infraestructuras, viviendas y fábricas ascienden a mucho más de la cantidad nombrada.

“A ello hay que sumar daños ambientales y personales, que fueron infligidos a las víctimas de guerra y que no se pueden cuantificar por el momento. Partimos de que cientos de miles de personas han muerto por la guerra. Sus allegados tienen derecho a una indemnización,” afirmó.

Junto con el acceso a los fondos del Banco Nacional Ruso congelados en los países del club de naciones industrializadas del G7, pidió por ello que Kiev pueda recibir como reparación el dinero almacenado en el extranjero por empresas estatales rusas como Gazprom o Rosneft.

Solicitó también que Ucrania obtenga acceso las propiedades congeladas de los oligarcas rusos.

“Las razones para el levantamiento de la inmunidad estatal para los bienes extranjeros de un estado agresor como Rusia deberían quedar ancladas en el contrato internacional,” dijo, en relación al hipotético mecanismo de compensación que se establecería tras la correspondiente resolución de la ONU.

Éste permitiría a los estados que se le adhirieran modificar sus legislaciones nacionales para permitir la confiscación de los bienes rusos y se crearía una comisión internacional para estudiar las solicitudes de indemnización, indicó.

Maliuska, que este jueves se entrevistó en Berlín con su homólogo alemán, Marco Buschmann, pidió para ello el apoyo del Gobierno germano en la Asamblea General de la ONU, ya que según dijo éste llevaría a otros países a sumarse también a la iniciativa.