Un análisis realizado por la Universidad de Pensilvania adelantó un debilitamiento del nuevo coronavirus y una transición hacia la “endemicidad”. Cuáles son las claves de ese cálculo.
Mientras la pandemia en desarrollo, causada por el síndrome respiratorio agudo severo coronavirus-2 (SARS-CoV-2) amenaza con ser uno de los mayores desafíos de nuestro tiempo, una reciente investigación adelanta que la amenaza puede volverse manejable en los próximos años.
Según un trabajo, publicado en la revista Science Advance, en la medida que transcurra el tiempo el SARS-CoV-2 se hará endémico en la población mundial. Incluso, de acuerdo a los investigadores, el actual coronavirus podría comportarse como otros coronavirus que causan un resfriado común, afectando sobre todo a los niños pequeños que aún no han sido vacunados o expuestos al patógeno.
Según datos de un modelo numérico presentado por la Universidad de Pensilvania, en los Estados Unidos, hay “creciente evidencia que sugiere un resurgimiento aparentemente inevitable de la enfermedad hacia el endemismo en el futuro previsible”.
El estudio toma como parámetros la enfermedad asociada con el SARS-CoV-2, según grupos de edad vulnerables y la carga de infección y morbilidad. “Después de la infección por SARS-CoV-2, hay una firma clara de los resultados cada vez más graves y de mortalidad con la edad”, se explicó en el trabajo.
La aparición histórica de infecciones respiratorias agudas indica los patrones de incidencia por edad. Esto motiva los esfuerzos para vincular la posible circulación de la edad futura y la mortalidad para comprender la carga de salud en evolución de la pandemia.
La primera conclusión es que, teniendo en cuenta que la gravedad de el Covid-19 es generalmente menor entre los niños, se espera que la carga global de esta enfermedad disminuya.
Para uno de los responsables del trabajo, Ottar Bjornstad, de la Universidad de Pensilvania, “tras la infección por SARS-CoV-2, se ha observado una clara tendencia a la gravedad y mortalidad con la edad”
Siguiendo este comportamiento, los resultados del modelo secuenciado sugieren “que el riesgo de infección probablemente se desplazará a los niños más pequeños a medida que la comunidad adulta se inmunice, ya sea mediante la vacunación o la exposición al virus”.
Los modelistas resaltaron la validez de sus predicciones, al sostener que su propuesta se basa en un modelo multicompartimental susceptible-infeccioso-recuperado-susceptible estructurado por edad que permite proyecciones para la circulación de la edad futura y la carga de enfermedad del virus SARS-CoV-2 en varios escenarios posible
Bjornstad sostiene, en los considerando que explican el estudio, que tales cambios se han observado en otros coronavirus y virus de la gripe a medida que han surgido y luego se han hecho endémicos.
La investigación también tomó en cuenta la demografía y la mezcla social para 11 países diferentes elegidos para abarcar diversos escenarios. A lo largo de un horizonte de 20 años, se evaluó el riesgo específico por edad durante una epidemia virgen, a mediano plazo y un escenario de circulación endémica a largo plazo.
El modelo además explicaría el movimiento del virus entre los jóvenes. “Se prevé que los jóvenes, que por el SRAS-CoV-2 sufren una carga leve de enfermedad, tendrán las tasas más altas de infección. La dinámica se mueve ya que las personas mayores están protegidas de la infección por una infección previa”, sostiene el documento publicado en Science Advance.
Los modelistas también mencionan el trabajo genómico en curso de la pandemia de 1889/1890 que mató a millones de personas, probablemente causado por la aparición de HCoV-OC43, y que ahora es un coronavirus endémico leve que infecta repetidamente.
Para los escenarios más sombríos, el exceso de muertes debido a reinfecciones graves continuas, que resultan de la disminución de la inmunidad a la reinfección, continuaría sino se disponen de herramientas farmacéuticas eficaces, lo que incluye el rol de las vacunas.