El doctor Alfredo Drocchi habló con Cadena 3 y reiteró las advertencias que viene realizando desde hace años respecto al avance del narcotráfico en la región.

El triple crimen de Florencio Varela que conmocionó al país sigue generando especulaciones que incluso alcanzan tintes políticos en la búsqueda de responsabilidades. En este contexto, el doctor y exjuez de La Matanza, Alfredo Drocchi, compartió su perspectiva y reiteró advertencias que viene realizando desde hace décadas sobre el avance del narcotráfico en la región.
El ex magistrado, quien desde 1997 alerta sobre la presencia de organizaciones criminales en el Gran Buenos Aires, señaló que, «se sabe que hay células de incendio luminoso que operan en la zona de todo el Gran Buenos Aires, y que la droga avanza y avanza».
Según el ex juez, se cometió un error significativo al descentralizar el combate contra el narcotráfico, particularmente con la provincialización del narcomenudeo. «Solo sirvió para generar estadísticas, pero no para combatir realmente a dónde hay», afirmó, explicando que esta medida permitió que se capturaran solo «peces muy chiquititos», dejando intactas las estructuras más grandes del crimen organizado.
En su opinión, esta política facilitó prácticas corruptas. «Las personas que hacían las cosas mal le comunicaban a un juez que tenían a alguien por tenencia simple, y se quedaban con el producto, con la droga, con el dinero, y seguían trabajando».
El ex juez también destacó la escalada de violencia en La Matanza, donde la aparición de cuerpos descuartizados es recurrente. «Hace unos meses, bastante tiempo, que en La Matanza aparecen cuerpos descuartizados, más o menos entre una semana y diez días», relató, mencionando un caso reciente en el río Matanza, cerca del límite con Ezeiza, en una zona conocida como el casino de Caimanes, donde años atrás él mismo participó en un procedimiento relacionado con el tráfico de drogas. Además, recordó un hecho reciente: «Hace un mes y un poquito, aparecieron tres chicas empaladas». Para Drocchi, estos hechos reflejan «la naturalización del horror» en la región, un fenómeno que, según él, no debería sorprender a nadie.
El exmagistrado atribuyó parte de la problemática a una «nueva generación de narcos» que compiten por demostrar quién es más brutal, generando «una carrera del espanto» para infundir terror y mantener el control territorial. «Es generar el terror, el horror, para que le tengan miedo y para que se subordinen a ellos», explicó en Cadena 3.
Drocchi comparó esta situación con lo observado en otros países, pero señaló que ahora «ha llegado a nuestras puertas, ha llegado a Buenos Aires». Según él, el problema se agravó tras avances en el combate al narcotráfico en Santa Fe, lo que habría desplazado parte de la actividad criminal hacia Buenos Aires.
En cuanto a la provincialización del narcomenudeo, Drocchi la calificó como un «gravísimo error» que generó oportunidades para la corrupción y debilitó las investigaciones federales. «La ley le da la posibilidad a que el juez diga ‘notifique lo de la formación de la causa y déjelo ahí’, y por otro lado, si quedaban con droga y con el dinero», afirmó, añadiendo que esta práctica dificulta desmantelar las redes más amplias del narcotráfico. «Un comando único gana una guerra. Acá se ha diversificado de una manera tremenda el combate contra el narcotráfico. No hay un organismo especializado», subrayó.
Drocchi también expresó preocupación por la participación de menores en estas actividades. «Comienzan siendo soldaditos con 14 años, 12 años, 15, van ascendiendo en ese escalafón de la narcoactividad», dijo, destacando que a los 20 años muchos ya buscan consolidarse como «empresarios» del crimen. Por ello, propuso bajar la edad de imputabilidad a 12 años, argumentando que los 16 años actuales son insuficientes para abordar esta realidad. «La vida no vale nada, y matan», lamentó, refiriéndose a la brutalidad de los crímenes recientes, como los cuerpos mutilados que aparecen cada 7 a 10 días en La Matanza.
Finalmente, el exjuez insistió en la necesidad de un cambio legislativo y de un enfoque federal para combatir el narcotráfico. «Esto tiene que estar en manos de la justicia federal», afirmó, criticando la falta de recursos y especialización en las provincias. «No se le puede dar ventaja a un enemigo tan poderoso», concluyó.