Colocó una espuma en el sistema de navegación para tratar de retrasar o cancelar un vuelo, con la esperanza de que pudiera trabajar más.
El pasado 17 de julio, el vuelo de American Airlines entre Miami y Nasáu, en Bahamas, fue retrasado después de que los pilotos accedieran al interior del avión. Al encender todos los sistemas de la nave, apareció un mensaje de error en el sistema de navegación, uno de los elementos clave para cualquier trayecto por la importante información que ofrece.
Los 150 pasajeros que iban a tomar ese vuelo tuvieron que esperar a que la nave fuera revisada. Cuando los mecánicos accedieron al avión, encontraron el problema: alguien había colocado una pieza de espuma pegada dentro del sistema de navegación, más concretamente en el módulo de datos aéreos.
American Airlines revisó entonces las cámaras de seguridad. Tal y como publica ABC News, vieron que una persona había llegado conduciendo hasta el avión, había subido a la nave y pasado siete minutos trabajando en la zona en la que se encuentra ubicado el sistema de navegación. Los propios compañeros de trabajo identificaron a esa persona por su peculiar cojera.
Solo quería trabajar más
Se trataba de Abdul-Majeed Marouf Ahmed Alani, un mecánico de la compañía que admitió haber manipulado el sistema de navegación del avión para poder hacer más horas extras. La compañía presentó una denuncia penal ante un tribunal federal, que ha comenzado a juzgarse este jueves.
Jose A. Ruiz, que trabaja para el FBI en cuestiones de terrorismo aéreo, ha explicado las intenciones del mecánico: “Alani declaró que su intención no era causar daño a la aeronave ni a sus pasajeros. Quería provocar un retraso o la cancelación del vuelo, con la esperanza de conseguir horas extra en el trabajo”.
Esta acción tuvo lugar en medio de una polémica por la que la American Airlines ha acusado a los mecánicos de ralentizar su trabajo de manera ilegal, una situación que ha provocado cientos de cancelaciones. La compañía aérea y los trabajadores están llamados a reanudar las negociaciones el próximo 16 de septiembre y contarán con la ayuda de un mediador federal para llegar a un acuerdo.
American Airlines ha señalado que “estamos tomando este asunto muy en serio” y que han cooperado totalmente con la investigación. La compañía retiró el avión del servicio nada más tener conocimiento del incidente y no volvió a volar hasta que fue inspeccionado y reparado a conciencia por varios equipos de mecánicos.