Las tropas niponas invadieron el país entre 1910 y 1945, cometiendo numerosas agresiones contra la población
El Tribunal del Distrito de Seúl ha ordenado este viernes al Gobierno de Japón indemnizar a las mujeres que obligaron a prostituirse durante la invasión de la península de Corea por parte de las tropas niponas desde 1910 hasta el final de la Segunda Guerra Mundial, en 1945, con cifras que alcanzan los 100 millones de wones (más de 74.500 euros) por víctima.
«La evidencias materiales y los testimonios muestran que las víctimas sufrieron un dolor mental y físico extremo e inimaginable debido a los actos ilegales del acusado», señala la sentencia del tribunal.
La acusación, presentada en 2013, refleja el caso concreto de doce mujeres -sólo cinco de ellas continúan con vida- que fueron obligadas a prostituirse durante la ocupación japonesa de la península de Corea, que en calidad de colonia estuvo dominada durante casi toda la primera mitad del siglo XX.
El litigio no pudo ser remitido a un tribunal hasta enero de 2016, un año después de que Japón, que se ha negado a aceptar el caso, y Corea del Sur anunciaran un acuerdo «final e irreversible», por el que el Estado nipón se comprometía a ingresar 9,3 millones de dólares (7,5 millones de euros) en un fondo de compensación.
Sin embargo, las asociaciones de víctimas y las supervivientes protestaron alegando que no habían sido incluidas, ni consultadas. Así, con la llegada del actual presidente de Corea del Sur, Moon Jae In, en 2017, el Gobierno decidió cancelar el acuerdo.
Japón defiende que el caso debe ser desestimado puesto que cuenta con la soberanía que le otorga inmunidad frente a una demanda civil ante tribunales extranjeros. Sin embargo, las víctimas alegan que esta figura jurídica no contempla los crímenes de guerra, o aquellos de lesa humanidad.
A esta sentencia, avanza la agencia surcoreana de noticias Yonhap, podría sumarse otra en este sentido durante la próxima semana.
El número de las conocidas como «mujeres de confort» que fueron víctimas de esclavitud sexual es cuestión de debate. Las estimaciones más conservadoras cifran en 20.000 las jóvenes forzadas, mientras que otros estudios elevan la cifra hasta las 410.000, no sólo en Corea, sino también en China, Filipinas, Vietnam, Tailandia, Malasia, Indonesia y otros territorios ocupados por las tropas imperiales japonesas.