Se pasaba horas viendo estos vídeos, además de confraternizar con un grupo de musulmanes radicalizados.
Una joven danesa llamada Lisa Borch asesinó junto a su novio radical islámico a su madre. El arma homicida fue un cuchillo largo de cocina con el cual apuñaló a su madre al menos 20 veces. Ella tiene 15 años y su novio, de nombre Bakhtiar Mohammed Abdulla, cuenta con 29. Los crímenes se produjeron en el pueblo de Kvissel, al norte de Dinamarca, en octubre del año pasado, según reconstruye «Bild».
Borch había sido sentenciada hace nueve años por radicalismo, al que llegó luego de conocer a militantes islámicos fundamentalistas en un centro de acogida cercano. Poco después, establecería una relación con Bakhtiar Mohammed Abdulla. Luego del suceso, la adolescente llamó a la policía afirmando que su madre, de nombre Tina Römer Holtegaard, había sido asaltada por un hombre blanco que «se dio a al fuga».
A la llegada, la policía danesa encontró a la fallecida en la cama, cubierta en su propia sangre. Se descubrió a la sospechosa, Lisa Borch, jugando con el iPhone y mirando vídeos en Youtube a la llegada de las fuerzas de seguridad. No quiso acompañar a los agentes a la escena del crimen y apuntó solo la dirección del cadáver. Posteriormente, su historial de reproducciones en Youtube delató que había visto continuamente el asesinato de varios rehenes británicos por el Estado Islámico poco antes. Según la investigación, la hermana gemela de la acusada hubo de marcharse de este hogar por «las disputas» entre la madre y la hija.
En el juicio posterior, tanto Borch como Abdulla se acusaron uno a otro de cometer los crímenes. Ella afirmó que lo había matado él, mientras que el sospechoso afirmó que había llegado a la escena luego del suceso. Las huellas dactilares le delataron, afirma la policía danesa. Borch fue sentenciada a 9 años de cárcel, mientras que Abdulla lo fue a 13 años, y a la expulsión de Dinamarca acabada su condena.