La policía de Colombia apresó a una mujer que había sido acusada por su propia hija. Cuando las niñas cumplían 12 años, la mujer vendía su virginidad por unos 145 euros. Las autoridades también detuvieron al padre biológico del bebé que tuvo una de ellas.
La mujer acusada de vender la virginidad de 12 de sus hijas fue denunciada por una de las niñas, que quedó embarazada. La menor contó que sus once hermanas, ya mayores de edad, también fueron víctimas.
La mujer, de 45 años, fue detenida en un barrio del sur de Bogotá junto con un hombre, de 51, padre biológico del bebé que dio a luz la joven de 14 años que denunció los abusos a los que era sometida.
Según las investigaciones de la Policía Judicial, cuando las hijas de Zapata cumplían 12 años su madre vendía la virginidad de las niñas por hasta 400.000 pesos colombianos. “Duele que una madre haga esto”, dijo a periodistas el comandante operativo de la policía de Bogotá, coronel Carlos Meléndez, quien aseguró que la menor que denunció los abusos contó que once de sus hermanas, hoy mayores de edad, también fueron víctimas de este tipo prostitución.
La madre “contactaba a hombres con solvencia económica y altamente depravados para que mantuvieran relaciones sexuales con las menores cuando éstas cumplían 12 años”, explicó el coronel.
El jefe policial destacó el valor de la adolescente para alertar lo ocurrido. “A partir de allí, se inició todo el trabajo de investigación que incluyó amenazas de la misma madre y del señor Tito Cornelio”, agregó el oficial.
La mujer, que no aceptó los cargos, deberá permanecer en la cárcel El Buen Pastor de Bogotá, mientras que Daza continuará recluido en la Cárcel Modelo. Ambos están acusados de acceso carnal abusivo a menores de 14 años e inducción a la prostitución. Zapata tiene también un niño de 11 años y una niña de 9, que quedaron al cuidado del organismo de protección social. La menor de 16 años que denunció el caso recibe apoyo psicológico del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar.