El litio es un mineral estratégico que se exporta a granel. Con la idea de desarrollar una industria energética con alto valor agregado, la empresa Y-Tec, el Conicet y la Universidad Nacional de Jujuy desarrollan las primeras baterías de litio del país.
El litio, un mineral que durante años sólo fue extraído y exportado, es el insumo clave para las baterías de almacenamiento eléctrico de última generación que se usan en celulares, notebooks, automóviles eléctricos y satélites.
La puesta en marcha del Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas sobre el Litio, en la localidad jujeña de Palpalá, da inicio a un proyecto para agregarle valor tecnológico y realizar el ciclo completo de producción, desde la extracción y purificación de la materia prima (sales de litio), pasando por la elaboración de los materiales activos y electrodos, hasta la fabricación de las celdas de combustible (pilas) y packs de celdas (baterías), enfocado hacia el uso en vehículos eléctricos.
Este proyecto liderado por la empresa estatal Y-Tec (cuyo 51 por ciento pertenece a YPF y el 49 por ciento al Conicet) reúne a la provincia de Jujuy, la Universidad Nacional de Jujuy (UNJu), el Conicet, Jemse (Jujuy Energía y Minería SE) y equipos de trabajo de las universidades nacionales de La Plata (UNLP) y Córdoba (UNC). El convenio fue firmado por Eduardo Fellner, gobernador de la provincia de Jujuy; Miguel Galuccio, CEO de YPF; Santiago Sacerdote, vicepresidente del Conicet; Gustavo Bianchi, director general de Y-Tec, y Rodolfo Tecchi, rector de la UNJu.
Jujuy es parte de “la Arabia Saudita del litio”, posee reservas minerales para la explotación de litio que posicionan al país como productor de importancia internacional.
En el año 2011, el decreto acuerdo Nº 7592 del gobernador Walter Barrionuevo declaró de interés las reservas minerales que contengan litio, poniendo el acento en la protección ambiental de sus ecosistemas sumamente frágiles y creó un comité científico para el análisis de los proyectos.
Gustavo Bianchi, director de Y-Tec, explica que con este centro tecnológico “apuntamos hacia la soberanía energética nacional y a desarrollar en la provincia toda la cadena de valor del litio, desde la materia prima hasta la batería terminada. Se trata de una cadena tecnológica en la que se multiplica casi por mil el valor agregado: el carbonato de litio cotiza unos 5 dólares el kilo, la batería de vehículo eléctrico –que utiliza 5 kilogramos de litio– vale unos 25 mil dólares”.
Este centro, impulsado en el marco de la creciente demanda de energía en el país y la necesidad de ir reconvirtiendo la matriz energética nacional hacia un mayor uso de energías renovables, será de doble dependencia entre el Conicet y la UNJu, y se instalará en un emblemático edificio de 4 mil metros cuadrados donado por la empresa Aceros Zapla. “Palpalá volverá a ser el motor de desarrollo de la provincia, como lo pensó el general Savio”, afirma el rector Rodolfo Tecchi. Hace 70 años, Palpalá fue el corazón de la industria del acero; en Altos Hornos Zapla (hoy Aceros Zapla), el general Manuel Savio, a cargo de Fabricaciones Militares, lograba allí la primera colada de arrabio. Hoy, la provincia de Jujuy vuelve a tener una oportunidad para dejar atrás su anhelado desarrollo tecnológico a partir de un mineral considerado estratégico. “Estamos trabajando en dos vertientes principales –sostiene Tecchi–. Por un lado, radicar investigadores ya formados, y por otro, especializar en esta temática estratégica nuestros propios recursos humanos.”
Sacerdote, por su parte, sostuvo que “esta iniciativa conjunta es un paso más para seguir consolidando a Jujuy como una plaza atractiva para realizar investigaciones en temas estratégicos para la provincia y el país”.
Galuccio detalló que “proyectos como motorizar el tema del litio pueden llegar a cambiar la economía de una provincia y una región”. Y refiriéndose a la importancia de la cuestión ambiental y las energías renovables, destacó que “desde YPF hemos empujado fuertemente este tema porque tiene un potencial importante en la fabricación de autos híbridos en el país”.
Y-Tec obtuvo del Conicet la licencia de un proceso electroquímico patentado por Ernesto Calvo (Inquimae UBA) para la extracción y purificación de cloruro de litio, que reduce drásticamente el impacto ambiental de la actividad que hasta ahora es hecha mediante evaporación y consume gran cantidad de agua.
En simultáneo ya se han montado en Y-Tec plantas piloto para ensayar en el laboratorio las innovaciones que luego habrá que llevar a escala industrial: una planta de extracción electroquímica, una para el desarrollo de materiales (óxidos de LiFePo4) para fábricas de baterías (materiales poliméricos) y otra de electrodos para fabricar ánodos, cátodos y celdas elementales. Ya están trabajando en el prototipo, y para marzo se espera contar con la primera celda Y-Tec, es decir la primera batería de litio hecha totalmente en la Argentina.