Se trata de un proyecto común de la Universidad de La Plata y Astilleros Río Santiago. Todas las características.
Con el objetivo de intentar solucionar en parte la problemática habitacional que existe en país desde hace varias décadas, la Universidad de La Plata (UNLP) y Astilleros Río Santiago planean crear una mega impresora 3D para construir viviendas sociales a base de mortero y una mezcla de características cementicias que incluye componentes adicionales para garantizar un fraguado ultra rápido y resistente.
El prototipo, de acuerdo a los desarrolladores, permitirá fabricar viviendas sociales de una forma más económica, rápida, y con materiales reciclables.
¿Cómo será la impresora?
A diferencia de las impresoras 3D convencionales, que en promedio tienen una dimensión de 50 por 50 centímetros, el proyecto planeado por UNLP es considerablemente más grande.
Se trata de una verdadera mega impresora ideal para construir barrios sociales de manera rápida y económica.
Pablo Ringegni, director del Grupo de Ensayos Mecánicos Aplicados (GEMA-UNLP), que llevará adelante el proyecto, precisó que “el prototipeado parte de un pórtico de 10 metros de ancho montado sobre unos rieles que se ensamblan hasta lograr el largo del recorrido necesario para cada construcción”.
De esta forma, si se ensamblan 5 metros de rieles, se podrá construir una vivienda de diez por cinco metros.
Cómo funcionará
“Sobre el pórtico se monta un puente que une ambas columnas, con un carro que debe desplazarse hacia ambos lados. A su vez, todo el puente debe poder ascender y descender”, explicó Ringegni.
El ingeniero resaltó que “se podrían hacer de 40 metros y lograr varias casas sociales velozmente ya que la máquina, más allá de necesitar que se la supervise, funciona de manera autónoma”.
En ese sentido, todos “los movimientos pueden ser diseñados con mecanismos comandados por una unidad digital de control programable, garantizando la practicidad y funcionalidad de la máquina”.
Sobre el carro va montado el cabezal donde se ubican las “boquillas o dosificadores de mortero”, que irán vertiendo la mezcla cementicia con la consistencia adecuada para evitar desmoronamientos y aplastamientos del material durante el proceso de fabricación de la casa.
A medida que ese cabezal pasa una y otra vez, vierte el material en capas, construye y forma las paredes que estructuran la casa.
Según adelantaron los ingenieros de la UNLP, para definir el mortero a utilizar se evaluarán previamente diferentes mezclas hasta hallar la que mejor se adapte a las necesidades constructivas y que sea compatible con el método a utilizar.
La impresora de casas contará también con una tolva de almacenamiento dotada con una bomba de mortero que enviará la mezcla por medio de un conducto telescópico a un depósito situado en el puente de la impresora.
Desde allí se alimenta a un motor extrusor dimensionado para este fin, donde se incorpora a la mezcla el acelerador de fraguante. Todo ello se conecta a los cabezales o boquillas que vierten el material para la construcción.
¿Qué dijeron los impulsores?
El vicepresidente institucional de la Universidad Nacional de La Plata, Marcos Actis y el decano de la facultad de Ingeniería, Horacio Frene, junto al presidente del Astillero Rio Santiago, Ariel Basteiro, sellaron un convenio específico en las instalaciones de la planta naval, ubicada en la localidad de Ensenada, para el diseño y prototipeado de la impresora 3D.
Actis destacó la importancia de trabajar en conjunto con el Astillero Rio Santiago y resaltó que “gracias al impulso de la actual gestión podemos concretar este trabajo que realizaremos entre la Universidad y el Astillero, en proyectos de interés social y también en otros proyectos que puedan servir a la industria naviera”.
Por su parte Basteiro aseguró que “este acuerdo permite crear un prototipeado de esta máquina, para seguir innovando en tecnología y brindar soluciones habitacionales, de forma ágil, en un país que tiene una deuda fuerte en cuestiones de hábitat”.
En tanto, el decano de la facultad de Ingeniería, Horacio Frene, subrayó que “es importante generar una herramienta para dar respuesta habitacional a un sector de la sociedad relegada, pero también será de gran utilidad y aplicable a la industria y a las obras civiles, como apoyo en espacios para oficinas técnicas, baños y otras dependencias. Además -agregó- hay esta tecnología tiene un enorme potencial ya que puede adaptarse y dar respuesta en distintos suelos del país, desde Misiones hasta Santa Cruz”.
El problema habitacional en el país
Según datos oficiales, una de cada tres familias tiene problemas de vivienda. Se trata de casi cuatro millones de núcleos familiares, de los cuales más de una tercera parte requiere de la construcción de una vivienda.
Asimismo, el resto de los hogares padece condiciones de precariedad, falta de servicios básicos, o se desarrolla en condiciones de hacinamiento.