La creadora del Movimiento Empresarial Anti Bloqueo (MEAB) habló a través de la 99.9 de lo que le tocó pasar como empresaria y la decisión de juntarse con sus pares para detener los bloqueos de fábricas.
Un grupo de empresarios argentinos se ha cansado de los bloqueos que sistemáticamente llevan adelante los sindicatos y decidieron formar el “Movimiento Empresarial Anti Bloqueo” (MEAB). Su fundadora es Verónica Razzini que atravesó una situación de estas características y decidió hacer algo.
“El 8 de junio hará un año que tuvimos un bloqueo del Sindicato de Camioneros que conduce Sergio Aladio en Santa Fe. Vivimos una experiencia horrible durante 3 meses y decidimos como empresa y familia no acceder a las extorsiones, el bloqueo ni las amenazas. Dentro de lo que marca la ley, nos mantuvimos en nuestra postura y fuimos a la justicia denunciándolos penalmente. En ambos frentes, conseguimos resultados positivos pero vivimos cosas terribles. Tuvimos que cerrar y no poder trabajar, con momentos difíciles, pero logramos blindarnos de esta gente”, remarcó en la 99.9 sobre lo que le tocó pasar.
A diferencia de otras situaciones, en su caso como el de tantos otros, el principal problema para destrabar estos conflictos no lo encontraron en la justicia: “los que más nos complicaron a nosotros fueron los del Ministerio de Trabajo de la provincia que lo hemos visto en otros ejemplos porque son funcionales a los sindicatos. Actúan como escribanías, los sindicatos te llevan al Ministerio y ahí adentro te extorsionan, aprietan y obligan a firmar cosas que no son legales”.
A partir de toda esa experiencia, dieron un paso adelante y se organizaron para tener una reacción ante este intento de imponer condiciones: “decidimos hacer algo, nos juntamos varios empresarios que pasamos por esto y dijimos basta porque está fuera de la ley. Formamos el Movimiento Empresarial Antibloqueo y hoy somos 30 empresarios de todo el país. Cada vez se suman más personas con diferentes sindicatos en el medio, analizamos todo y tratamos de ayudarlos. Ya hemos recibido llamados de auxilio ante empresarios que no piensan ceder ante las presiones”.
La postura está clara y seguramente seguirán sumando adeptos teniendo en cuenta lo difícil que es para cualquier argentino montar una empresa como para además, soportar las extorsiones: “ser empresario en Argentina es muy complejo pero queremos salir del lugar de quejarnos y no hacer nada, sino terminamos siendo cómplices. Invitamos a participar a todos los que tengan ganas de decir basta a este atropello”.