Virginia Sosa, ex policía, estuvo presente en el acto donde Mauricio Macri y María Eugenia Vidal fueron agredidos en Mar del Plata y contó su versión de los hechos en la 99.9. También señaló que se presentó ante la justicia y no la llamaron a declarar: “nos presentamos ante la fiscalía para dar testimonio junto con otra compañera del PRO, pero no nos llamaron nunca”, dijo.
Los incidentes generados en la visita a Mar del Plata del presidente Mauricio Macri y la gobernadora María Eugenia Vidal, siguen en el centro de la escena porque la discusión se sigue dando con el aporte de distintos testigos. Una de las personas que estuvo en ese lugar fue la ex integrante de la polícia, Virginia Sosa que compartió su testimonio en la 99.9 teniendo en cuenta que el fiscal actuante en la causa, Dr. Juan Pablo Lódola no la recibió: “cuando supe donde sería el acto me opuse rotundamente”, dijo en principio. Luego abundó: “trabajé en esa zona y sé que es de alto riesgo, está rodeada por muchas villas. Me dijeron que me quede tranquilo porque habría un alto despliegue policial”.
A pesar de quedarse tranquila en ese momento, a medida que se acercaba al acto, empezó a ver que el operativo que le habían prometido no estaba en marcha. “Cuando íbamos para el lugar, desde Juan B. Justo y Córdoba hasta la intersección con Arturo Alió, sólo vimos dos agentes de tránsito y dos policías locales sin patrullero. Cuando doblamos para retomar en dirección a Calaza, no había móviles. Dos cuadras antes había dos policías locales diciendo que había que doblar”. La situación se repetía en el lugar donde iba a estar el presidente: “al momento que llegamos al lugar vi que había muy poca presencia policial y no me gustó nada”.
De a poco, se empezó a enrarecer el clima a través de la presencia de personas con malas intenciones: “de repente nos empezaron a empujar y era una mujer muy alterada, gritando. Le pregunté si tenía alguna carta para entregarle al presidente y me dijo que no tenía nada, se fue y no volvió más”. No terminaría todo allí claramente: “después aparecieron otras personas con una pancarta agresiva y les dije respetuosamente que no era el momento porque estamos en democracia y debemos ejercer el derecho a pensar distinto, pero me dijo que no le importaba nada. Cuando empezaron a hablar los mandatarios empezaron a salir estas personas con carteles gritándole al presidente”.
Lo extraño de este contexto es que a la falta de presencia policial, se le agregó una guardia de la UOCRA: “había un grupo de la UOCRA y UTE con pecheras blancas y cuando pregunté porque estaban ahí, me dijeron que era para hacer un cordón humano. Hicieron una zona liberada porque el presidente debe tener tres anillos de seguridad”, aseguró Sosa.
Después llegaría el momento cúlmine de la tensión: “en un momento quedé rodeada de los autos y la gente se empezó a abalanzar sobre los mismos. Golpeaban los vehículos con la palma de las manos, gritaban que Macri no tenía que volver más y no había policías. Los que ejercían la violencia mayor fueron menores que se reían mientras hacían sus maldades”. Todo sucedió ante la mirada de los efectivos de la policía local que no intervino en ningún momento y sólo se dedicaron a contener en ese momento, los pocos efectivos de la bonaerense que habían: “la policía local quedó de lado en ese momento, la bonaerense era mínima y corría riesgo, por eso Telpuk tendrá que brindar explicaciones también”.
Toda esta experiencia trataron de llevarla a la justicia porque incluso a través de Facebook le habían acercado a Sosa los nombres y direcciones de los agresores por lo que era información importante: “nos presentamos ante la fiscalía para dar testimonio junto con otra compañera del PRO, pero no nos llamaron nunca. Le pedí al fiscal Berlingeri el teléfono de Lódola, pude hablar con él, me hizo algunas preguntas. Nos dijeron que al otro día nos iba a tomar declaración el Jefe Departamental que es una de las personas que no facilitó la cantidad de policías que debían estar en el acto y con él no me presentaba”.
Ante las desprolijidades, su declaración quedó en la nada y ahora buscan que todos estos detalles se conozcan ante las versiones cruzadas que se están dando en los distintos medios.