La integrante de la ONG “Crianza Sana” de Río Cuarto habló en la 99.9 sobre los problemas que tienen los padres que son separados de sus hijos en medio de causas judiciales que a veces llevan años.
Los problemas de padres principalmente con los tribunales de familia no son una exclusividad de Mar del Plata sino que existen en todo el país. Recientemente, desde la ONG “Crianza Sana” de Río Cuarto hicieron una movilización para mostrar la cantidad de padres que sufren este flagelo y encontraron respuesta inmediata.
Una de las integrantes de la entidad, Viviana Pomilio, habló en la 99.9 indicando que “un día después de la convocatoria a Tribunales de Río Cuarto, dos de estas personas que se presentaron en la manifestación me llamaron para decirme que se había solucionado el problema. Un papá que hacía 3 meses que no veía a su hija por una obstaculización por parte de su mamá y lo llamó la abogada de ella para decirle que podía retirarla ese mismo día del colegio. Después me llamó una abuela que hace dos años que no veía a su nieta y me contó que la llamaron porque el problema estaba resuelto”.
Las excusas siempre están a la orden del día pero mientras tanto hay muchas personas que no pueden tener el vínculo que deberían con su familia más directa: “si hablas con personas de la justicia te dicen que son pocos los recursos y muchas las denuncias que reciben. Muchas veces se ponen excusas. Pedimos a la justicia que aceleren los trámites porque luego de las separaciones, una de la partes obstaculiza el vínculo con sus hijos, abuelos, sobrinos y la mayoría de las veces esto está basado en una denuncia de violencia de género o de abuso sexual hacia el pequeño”.
Lo que advirtió también Pomilio es que hay muchos caso de abuso y maltrato que provienen de parte de las propias madres y eso no está visibilizado. Incluso puso como ejemplo a la familia de Lucio Dupuy con quien tuvieron una reunión: “pensamos que después de Lucio Dupuy, iba a darse un antes y un después. Resulta que después de Lucio hay 96 niños que han fallecido en manos de sus progenitores, particularmente en manos de sus madres. Esto no puede seguir sucediendo”.