Los choques que estallaron el domingo en Nueva Delhi se deben a una controvertida ley de ciudadanía, considerada discriminatoria contra los musulmanes.
Al menos 33 personas murieron en Nueva Delhi en los enfrentamientos entre nacionalistas hindúes y musulmanes que estallaron el domingo, según un nuevo balance comunicado por los servicios hospitalarios.
El principal hospital de la zona donde se produjeron los enfrentamientos registró 30 muertos, indicó a la AFP su director, Sunil Kumar.
“Todos tenían heridas de bala”, dijo Kumar.
Otro hospital de la capital, anunció por su parte haber registrado tres fallecimientos vinculados con los enfrentamientos.
En la noche del miércoles se registraron algunos incidentes aislados de menor intensidad que no causaron víctimas, indicaron fuentes de seguridad.
Grupos de hombres armados con piedras, cuchillos y hasta armas de fuego siembran desde el domingo el caos en las zonas periféricas de mayoría musulmana del noreste de la capital india, a una decena de kilómetros del centro de la ciudad.
El domingo, los grupos armados hindúes atacaron lugares y personas identificadas como musulmanes, indicó la prensa india. Las bandas gritaban “Jai Shri Ram” (“Viva el Dios Rama”), según testigos citados por la prensa.
Los choques se deben a una controvertida ley de ciudadanía, que sus detractores consideran discriminatoria contra los musulmanes. Esta nueva ley que facilita la concesión de la ciudadanía a los refugiados, siempre y cuando no sean musulmanes.
El primer ministro indio Narendra Modi, un nacionalista hindú, instó este miércoles a los habitantes del territorio de Delhi a la “paz y fraternidad”.
Se trata de los peores enfrentamientos en décadas en Nueva Delhi y el jefe de gobierno de la capital había pedido al gobierno central que decrete un toque de queda y así como el despliegue del ejército.