El presidente del Partido Mejorar habló en la 99.9 sobre la decisión de varios clientes del Banco Credicoop de cerrar sus cuentas y señaló que “no nos podemos espantar cuando los ciudadanos ejercen su derecho ante una institución que está actuando en contra de sus intereses”.
Se ha generado una fuerte discusión en torno a la decisión de diversos productores de cerrar sus cuentas en el Banco Credicoop después de que su presidente Carlos Heller, presentara el proyecto de Impuesto a la Riqueza que afecta a muchos de sus propios clientes.
El presidente del Partido Mejorar, Yamil Santoro se refirió en la 99.9 a esta discusión que ya se instaló en el plano social: “el Credicoop no es al banco más probo de la Argentina. Parece que en este país uno no puede definir libremente que hacer con su dinero y sus fondos. Si una empresa no representa los valores de sus consumidores, parece que si uno no quiere tomar el servicio parece un escrache”.
Si bien el presidente del banco siempre tuvo la misma ideología, ahora queda en evidencia esa relación entre la política y el banco que disgustó a muchos clientes: “se están poniendo sobre la mesa los valores que representan los ejecutivos del banco. Heller ha presentado un proyecto anti capitalista, anti empresa y genero que las cooperativas agrarias decidieran retirar del Credicoop sus fondos y mucha gente adhirió a esa medida en una especie de capitalismo inteligente donde importa quien está del otro lado”.
El Credicoop tiene, de por si, diversos beneficios como la exención de impuestos por ser cooperativo, pero eso no redunda en beneficios para sus clientes. En ese sentido, Santoro indicó que “la particularidad es que no reparte dividendos y tampoco ofrece condiciones especiales a sus clientes como para brindarles una institución más competitiva ante la exención de impuestos. Lo que está proponiendo Heller es que se paguen más impuestos, entonces tendría que presentar un proyecto para terminar con la excepción que tiene su propio banco”.
Lo que tiene claro el dirigente político es que la expresión de parte de la sociedad, no puede ser tomada como un acto político. Incluso fue crítico de los dirigentes que salieron a apoyar a Heller: “no nos podemos espantar cuando los ciudadanos ejercen su derecho ante una institución que está actuando en contra de sus intereses. Hay que empezar a poner en valor el enojo, no está mal que la gente se deje pisotear y veo a los políticos más preocupados por defender a un par de una mala decisión que ver a su propio electorado. Creo que Juntos por el Cambio o al menos muchos de sus integrantes que apoyaron este tema, se están equivocando”.