La detención del ex jefe departamental, José Luis Segovia, es un tema que traerá aún más sorpresas, algunas de ellas, enormes. ¿Su remoción implicará una mejor seguridad para Mar del Plata? No. De ninguna manera.
Plantel SA denunció penalmente a Mariano Bowden y a otros funcionarios del EMVIAL. Los acusan de resolver una licitación a favor de Pasalto Materiales SRL perjudicando al erario público en más de $300 millones.
Se podrá debatir ad infinitum a Javier Gerardo Milei. Lo que no se puede eludir, es su rol en el mundo, colocando a la Argentina en el escenario global de un modo inédito. Nadie parece capaz de quedar afuera del impacto que su figura y su decir provocan en dirigentes, académicos, medios e influyentes digitales globales.
¿Se abrirán las puertas del averno? I. La detención del ex jefe departamental José Luis Segovia —anticipada largamente por este medio— trae aparejada la aparición de voces que hasta ahora, por miedo, han estado acalladas.
1) Lautaro Resúa (detrás de las rejas) | 2) Guido García (quiere saber) | 3) Axel Kicillof (violando derechos humanos) | 4) Bustamante & Ovejero (dos campeones) | 5) Diego García (¿y si le reclamamos a quien corresponde?) | 6) Gilardi & Zacarías («a matar o morir») | 7) Daniel Scioli (el Groucho Marx libertario) | 8) Luis Barrionuevo (el poder se le escurre entre los dedos) | 9) José Albistur (¿irán por él?) | 10) Victoria Villarruel (ningunearla, es un error)
O la historia de cómo, dos soñadores, contra todo el sistema político, provocaron un logro que habla fuerte y claro de la voluntad de cambio que se vive en la sociedad argentina.
