Una vez más
Es indudable que el poder corrompe. No es aún tiempo de señalar si hay dinero, cargos, prebendas, o algún negocio vinculado a los servicios municipales. Lo que sí está claro es que ni Cristian Azcona, ni Hernán Alcolea, y mucho menos Lucas Fiorini, podrán sostener ante el ciudadano atento que representan algo diferente en esta comunidad: votar la ordenanza de creación de policía local revela qué son, y qué están dispuestos a hacer.
Un anticipo de lo que vendrá
La idea misma de una gesta purificadora está omnipresente en el colectivo social de los argentinos.
TOP TEN 892
1) Javier Faroni (Fallido ingreso a escena) Productor teatral exitoso, por cierto, su especialidad es el detrás de escena. Pero por esta vez dejó lo conocido para ingresar al escenario principal a hacerle la “claque” al intendente Perogrullo/Cospelito. Penoso. No augura un cambio que sea bueno para la sociedad marplatense. 2) Lucas Fiorini (Era él, nomás) Desde el día 1 de la controversia por la policía municipal, fue quien trabajó para darle al intendente los votos que necesitaba para este nuevo fraude. Por lo menos, uno a quien mirar cuando lo que tiene que fallar, falle. Un caso de pistola…
Malas lenguas 892
Marx (Groucho) dixit. El bloque del Frente Renovador estaba, hasta la mañana del viernes, en la postura conjunta con el Bloque Atlántico y la UCR de no votar la ordenanza que daría luz a la falacia de “la policía municipal”. Era una cuestión de principios: tenían unos, pero rápidamente adoptaron otros que les habilitaron a votar con Pulti y el bloque del FPV.