La discípula

Juliana Santillán Juárez Brahím, la diputada nacional marplatense que se autopercibe abogada y —según sus propias palabras— discípula de Milei, no para de hacer papelones. Luego de su cruce con los residentes del Garrahan, repasamos algunas de las vergüenzas de esta nefasta figura que nunca debería haber trascendido del plano mediático.

El 24 de enero de 2017, Juliana Santillán Juárez Brahím, hoy diputada nacional por La Libertad Avanza, escribía en Twitter: «voy xel 2°doctorado en derecho, pero odio la referencia (Dra) Agrega años y en política atraza». Sí, es tan inútil que, queriendo mentir sobre su formación académica, escribió «atrasa» con z. La realidad, es que esta figurita mediática menor, luego devenida en política y —gracias a la relación que forjó con Javier Milei en los estudios de televisión— hoy diputada nacional, nunca obtuvo nada parecido a un título universitario. Su pergamino más avanzado es apenas una «Diplomatura en Economía Austríaca» obtenido luego de cursar apenas tres meses en la ESEADE, una universidad de corte libertario y nulo prestigio académico.

Ahora bien, nobleza obliga, Santillán sí intentó cursar la carrera de Abogacía en la Universidad Atlántida entre los años 2005 y 2006. Sin embargo, su rendimiento—tal como puede verse a continuación— no fue el mejor.

Un poco de historia

Pareciera que el coqueteo entre la hoy diputada nacional por La Libertad Avanza, Juliana Santillán Juárez Brahím y la política arrancó allá por 2005, fecha de la que data una foto en la que se la ve junto al ex intendente Aprile en un encuentro de militantes radicales. Algunos años más tarde, como militante de Cambiemos, aparece en una foto en la que se los puede ver, entre otros, a Guillermo Montenegro, Maxi Abad, Emiliano Giri, Lucas Fiorini y otro experto —como Santillán— en recorrer la política por caminos sinuosos: el hoy también libertario Alejandro Carrancio.

El diputado de la provincia de Buenos Aires Luciano Bugallo, narró en redes: «Sin entrar en cuestiones de felinos, pumas o gatos de bengala, pero para agregar al listado de «grandes saltos partidarios» de esta mina «anticasta», hay que decir que también estuvo 10 días, aproximadamente, en la Coalición Cívica de Mar del Plata, hasta que la rajaron por mitómana y trepadora. La historia es así: un día me escribe ella, de parte de un amigo, compañero de marchas y protesta (abogado, hoy político liberal y escritor), para decirme que quería sumarse a la CC, porque admiraba profundamente a Carrió, su historia, sus banderas, etc. Como era de MDP, la puse en contacto con nuestros dirigentes de allá, uno de ellos, hoy Legislador de la LLA (en aquel momento de la CC). Tomaron un café a media semana, el sábado siguiente participó en los «timbreos de Cambiemos» y el martes/miércoles de la semana siguiente (no pasó una semana), ya estaba sentada en Intratables como «abogada, dirigente de la Coalición Cívica y (escuchen bien) ESPECIALISTA EN ANTICORRUPCIÓN». Flor de chanta, mitómana, usurpadora de títulos y trepadora resultó, cuanto su única «condición» hasta ese momento, era la de publicar sus implantes siliconados en redes sociales. En fin, un dato más de color».

En 2020, Santillán intentó sumarse a Republicanos Unidos, el espacio que lideraba Yamil Santoro. Sin embargo, su costumbre de presentarse como abogada cuando no sabe cómo escribir «cloaca» tarde o temprano le iba a traer algún que otro dolor de cabeza: «Convengamos que en algún momento les iba a reventar el tema Santillán. La echamos de nuestro espacio por haber mentido sobre su currículum, falseado títulos y por plagio en diversas notas. Rejuntar descartes tiene su riesgo», publicó Santoro en sus redes.

Finalmente, un año más tarde, Juliana Santillán se sumó al espacio Republicanos Unidos, cuyo principal referente era Ricardo López Murphy, y desde allí participó de la alianza electoral Unión por todos, que la colocó en una boleta junto a Juan José Gómez Centurión. Fue por aquel tiempo que brindó a la FM 99.9 esta entrevista:

Con un pie en la política y el otro en lo mediático, cabe también recordar que Santillán fue una de las féminas que se prestó para las acciones de comunicación que buscan instalar en la opinión pública la incuestionable preferencia de Facundo Moyano por tener relaciones heterosexuales con mujeres de grata presencia, movida de la que también participaron en diferentes momentos la mismísima Susana Giménez, Nicole Neuman, Eva Bargiela (con quien llegó a casarse) o, actualmente, Natalia Cometto. ¿Cuánto sabrán Santillán y las demás sobre mantenimiento de calderas? Quizás sea por eso que estas relaciones no perduran.

A otro que conoció en el ámbito de los medios Juliana Santillán es al hoy presidente Javier Milei, con quien solía confrontar en la pantalla de Intratables. En las últimas horas se hicieron virales los fragmentos en los cuales, por ejemplo, Santillán opinaba que el cepo al dólar era una medida positiva si la implementaba Cambiemos, pero mala si la implementaba el kirchnerismo, comentarios por los que fue ridiculizada al aire por el entonces mediático economista.

Con Milei también tuvo algunos intercambios picantes por Twitter. El hoy presidente en un momento llegó a decirle: «Entiendo que el ladrón cree a todos de su misma condición en especial vos que vivís de los impuestos», a lo que ella le respondió: «lo bello d tener una vida es no currar con payasadas ni estar en Twitter Full Time. No debería rebajarme a tu nivel de agresión y existencialismo barato».

Cómo cambiaron las cosas al punto que, cuando Milei llegó a Mar del Plata para lanzar su campaña, Juliana Santillán fue la encargada de presentarlo, momento en el que ella se definió como su «discípula en la Escuela Austríaca de Economía».

Papelonera

Hoy completamente integrada a las filas de La Libertad Avanza, Santillán trabaja codo a codo con otro personaje nefasto de sinuoso andar en la política: Daniel Scioli, a quien ella criticaba con dureza en sus intervenciones televisivas hace sólo unos años. Fue con él que intentó en su momento hacer avanzar el proyecto que buscaba convertir a los clubes de futbol en Sociedades Anónimas Deportivas. En este afán, fue que Santillán terminó involucrada en un escándalo cuando se filtró un audio en el que intentaba persuadir a Juan Cruz Sanz, dirigente del club Bancruz de Río Gallegos de convertirlo en una SAD, diciéndole: «Te podés convertir en héroe».

«Hace 4 meses que trabajamos con Federico (Sturzenegger), Garro, Scioli y Cúneo Libarona en esto, que habilita a la inversión extranjera, viene a ser como una especie de fideicomiso», explicaba. «Se presenta ante la IGJ que es el ente que regula y audita a la AFA y se traba un conflicto, no es un juicio. Es una elaboración a propósito que hacemos desde la Justicia para meter el trámite, un papel en la IGJ. Tenemos inversores que vienen de la mano de la liga inglesa. Es un poco la figura que quiere instalar Verón en Estudiantes. Estamos alineados con el director de la IGJ, con absolutamente todo, pero necesitamos el club», le aseguró a Sanz.

Santillán suele acaparar mucha atención en las redes sociales, pero no por sus propuestas, sus ideas políticas o su aspecto físico, sino por su resistencia a usar un simple corrector ortográfico a la hora de hacer publicaciones. Algunos de sus hits más recordados son «cluaca», «serro» —en vez de «cerro»—, «esepcion», «candidataso», «haz» en vez de «as» y la más frecuente, «hallan» en vez de «hayan».

Hoy, Santillán está nuevamente en el ojo de la tormenta porque, en medio de un debate televisivo con los médicos residentes del Garrahan, aseguró que una familia puede sobrevivir con $709.000 mensuales. Y es que, con tal de aferrarse a su sueldo de $9 millones y a  los enormes privilegios de pertenecer a esa misma casta política que tanto critica, se ve que Santillán —que aceptó ser funcional a los intereses de comunicación de Pablo Moyano, y que no dejó camiseta política sin probarse— es capaz de decir absolutamente cualquier cosa.