Finalmente, y luego de años de diletancia, Argentina cerró un acuerdo con los Estados Unidos para la compra de aviones F-16 que actualmente cumplen servicio en Dinamarca.
Es una excelente decisión que, además, va en línea con lo que ha sido el desarrollo de las competencias que se enseñaron en la Escuela de Aviación Nacional a lo largo de su historia: desde la adquisición de los Sabré F86 en la década de 1970 a los A-4 en sus versiones naval y aérea, la formación de nuestros pilotos siempre se ha dado, esencialmente, sobre la base tecnológica que se desarrolla en Estados Unidos.
Nadie ha demostrado el nivel de competencia en el uso del material bélico estadounidense como la Fuerza Aérea Argentina durante la batalla de Malvinas: los aún vigentes A4 Fightinghawk —recuperados en instalaciones de la fuerza— demuestran cada día su robustez y calidad constructiva.
Tal como está dado, y ya ha sido señalado en este mismo espacio, Argentina cumplirá, en los próximos años, un rol relevante en lo que es el control y la seguridad del Estrecho de Magallanes, un paso interoceánico que adquiere una creciente relevancia, dado el escenario global actual.
Es un hecho así mismo que el Comando Sur de Estados Unidos esté viendo la situación estratégica con enorme claridad: la general Richardson, en una entrevista a un medio especializado que dirige Mario Montoto —padre de la dirigente de UP Fernanda Montoto Raverta— reveló que están trabajando para llevar adelante la creación de nodos de mantenimiento de aeronaves con el objetivo de dar sistematización a las flotas que forman parte de las distintas fuerza aéreas del continente que emplean aviones «Made in USA».
Aquí se abre una gran oportunidad en la materia: Argentina posee condiciones únicas en todo el continente para ser el hub de esta propuesta desde el área material Córdoba, que pertenece a la fuerza aérea del país.
El alineamiento anunciado por el presidente, no ha sido controvertido por fuerza política alguna. Factores menores del kirchnerismo sin valor político real —léase: votos— han expresado la liturgia castro chavista, pero eso no hace olas; no da ni genera inquietud.
El brigadier Xavier Isaac señaló desde Chile, en el marco de su presencia en la feria aeronáutica del país trasandino, que «muy pronto contaremos con los F-16 y se terminarán muchas especulaciones de algunos que hablaron sin saber nada. Vienen con todo el equipamiento, el armamento y todo lo necesario. Y en cuanto al sistema de reabastecimiento en vuelo, es algo que vamos a analizar detenidamente, sin apuro, porque los aviones tienen una gran autonomía y vamos a ver lo que se adapta mejor a nuestras posibilidades».
Cuarenta años de ausencia de política para el sector militar esencial a la construcción de la nación, parecen haber concluido.