Basta, Alberto

El mundo —o la parte del mundo que mira a la Argentina— se ríe del presidente Alberto Fernandez y su patética impostura de intentar brindar con tono presuntamente doctoral una cita ante el premier español, en la que ubicó a los mexicanos como descendientes de los indios, a los brasileños como venidos de la selva, y los argentinos como llegados de los barcos, identificando en ello un espíritu europeísta.