De encuestas y operaciones I. En tanto los accionistas marplatenses se desesperan por ver cómo salen de su propio laberinto de mentiras e irrealidades, en otros campamentos el ruido político es atroz. Es el caso del Frente Renovador, que busca instalar a Ariel Ciano con la triste maniobra de citarlo como “Cholo”, el apodo del padre, con el fin de sumar por algún lado. Ahora lo ubican como el dirigente que va a hacer bajar los precios en Mar del Plata, asegurando que fue él quien redujo el valor del metro cúbico de gas domiciliario. Deben tener cuidado: si siguen así le van a atribuir haber descubierto el paso que une los dos océanos, la libertad de medio continente, y posiblemente ser quien dio origen al Lava-Jato. Hacer campaña está bien; ciencia ficción es como demasiado.
De encuestas y operaciones II. Nerviosismo en Cambiemos: le salió contra a la formación política interna que lidera Juan Aicega, que hasta ahora detentaba la suma del poder. Mario Saavedra, docente militante en el PRO, se separó de la línea de Aicega y armó línea propia. A ello también hay que sumarle el sector de Emiliano Giri, que deshoja la margarita con sonrisa socarrona y dice entre dientes: “si me dejan afuera tengo ocho puntos, y algo voy a hacer”. Complicadísimos todos y esperando que la lapicera de María Eugenia “santificada sea” Vidal los bendiga. Qué nervios…
Asignaturas pendientes. Miguel Grassi Muñoz señaló que la compactación de vehículos secuestrados sería una solución ante el numero de motos y autos que, secuestrados o retirados de la vía pública, se amontonan en predios municipales. Nada de esto sería un problema si en ocho años de gestión, Pulti hubiera concluido los trámites y acciones que habían llevado en su momento los ex funcionarios Guillermo Alonso y Eduardo Gambini, que habilitaban a rematar los vehículos con el Banco Municipal de Remates de La Plata, lo que hubiera traído dinero a las arcas públicas. La desidia no fue sólo en ese tema, sino que por ocho años, el ex intendente se negó a firmar un acuerdo con la agencia de recaudación municipal y el Registro Automotor para que este cobrara el impuesto a los vehículos que por modelo tributan a las comunas. El acuerdo firmado por esta administración recientemente permitió recaudar en diecisiete días hábiles algo más de veinte mil pesos, que, proyectados, dan una cifra que podría superar anualmente los quinientos mil. La cifra indica con claridad meridiana que en ocho años se perdieron de ingresar al Tesoro municipal cuanto menos ocho millones de pesos. Y dicen que tienen equipo y saben gobernar.