De secretarios y elecciones desafortunadas. Las cosas no pintan bien para dos funcionarios del fuero federal nombrados por Inchausti, el encarcelador sistemático. Tal como hemos señalado en este medio, la situación del secretario Dario Molaro es compleja a punto tal, que va derecho a su expulsión tras las 18 denuncias de acoso sexual que el personal femenino ha volcado sobre él. No es el único: esta semana, dio testimonio por videoconferencia una empleada del mismo ámbito, en relación a otro secretario, Pablo Lega. Se trata de un caso complejo que implica acoso, amenazas, y abusos. Lega ha sido apartado del cargo, tiene prohibido concurrir al juzgado, y su caso está siendo elevado a la Corte para que se dictamine su proceso que, como en el caso de Molaro, tiene final anunciado.
El grupo de Whatsapp y el frasco de mermelada. El esquema comunicacional en General Pueyrredón responde a un modelo soviético fascista que concentra y regula la información buscando sellar grietas y dar un mensaje único. Funciona como lo hizo el esquema en el Proceso, en donde nadie hablaba si no tenía el permiso de algún actor del poder. Participan activamente del mismo un conjunto de “prenseros” que hacen de periodistas, integrados a un grupo de Whatsapp en el que inician el día coordinando el “mensaje”, y que por la noche reciben el mimo del poder en un diálogo grupal de cierre, felicitándose por la tarea cumplida. El grupo vive en su frasco de mermelada, creído que la realidad es la que dibujan de la manita del poder de turno.
Extraño. Puede leerse en la página web del Instituto Nacional de Epidemiologia Juan Hectór Jara que están llevando un escrutinio de vigilancia epidemiológica coordinado entre catorce municipios entre los cuales, insólitamente, no está General Pueyrredón. La ciudad cabecera de la Zona Sanitaria Octava ignora al instituto de referencia establecido como tal en la estrategia nacional ante la pandemia. En la pagina puede verse un video que expone las características del software de vigilancia epidemiológica desarrollado por el INE, que permite hacer trazados de rastreo y geolocalizacion que, afirman, es un instrumento para estar un paso adelante en la crisis. Extraño y torpe que no se participe del mismo, en el mejor interés de la ciudadanía.
Del dicho al hecho. El 11 de julio se reunieron en Mar del Plata Luana Volnovich (PAMI) Fernanda Montoto Raverta (ASPBA) y el intendente Guillermo Montenegro para anunciar que el ex EMHSA —hoy Houssay—, estaría preparado para la pandemia con un área especial para pacientes Covid-19. Al día de hoy, llevaba semanas sin director designado y, encima, ahora registra un brote de infectados por Coronavirus que habla a las claras de la distancia entre lo que se anuncia y lo que ocurre, la cual es enorme.