Ocultarás mis muertos. Nadie es responsable de nada. Quienes permitieron las muertes de la enfermera María Mariangeli por Covid-19, y de la cajera de Supermercados Toledo María Gómez por la caída de mampostería en un edificio de avenida Colon, están protegidos por una muralla de medios cómplices. En el caso de Gómez, la fiscalía entiende que esta muerte es un homicidio doloso. Se trataba de dos mujeres trabajadoras y luchadoras, con sueños, que dejan detrás hijos u que mueren por la desidia de un poder político que hace del acting diario su esencia, y que no acciona como debe para dar debida protección a los ciudadanos. El Estado no te está cuidando. Ninguno de los actores que hoy se disputan el favor político está a la altura de sus responsabilidades.
De declaraciones y hechos. Primero en un Zoom, luego en un comunicado conjunto, el titular del HIGA y el de Zona Sanitaria Octava hablaron de situación de crisis en los nosocomios oficiales. Un informe interno llegado a este medio señala que, al día viernes, en el HIGA, de acuerdo al parte de las ocho de la mañana, la situación era de seis casos sospechosos de Covid-19, y ningún caso cierto. En el hospital modular, internados en unidad de terapia intensiva, estaban dos vecinos de la ciudad, y en la sala general diez. Un total de doce. Lejos, muy lejos del punto de saturación. En el mismo registro —un audio que corrió por todas las redacciones—, dice: “están tirando una fake política que nada que ver, hay 40 camas UTI y ocupadas 6. En el modular hay 8 en total existiendo 24 camas con respiradores 42 camas comunes”. El mismo audio revela que la tensión es porque no hay, en 50 años, crecimiento de disponibilidad de camas, con todas las situaciones que se viven a diario y la constante presión de este tipo de dichos, genera tensión adicional en el personal del nosocomio.
Teletrabajo y cambio. Increíblemente, tuvo que salir de modo grosero Mario Pergolini a denostar la ley de teletrabajo para que se tomara nota de la barrabasada que voto el congreso. Una norma que atrasa y en la que se le permitió opinar a los mismos sectores sindicales que atrasan cincuenta años, y pretenden transferir al texto el criterio de los acuerdos laborales de 1974. Pero, no es más extraño —o patético— que se publiquen títulos, en diarios como La Nación, que hablan de que Mauricio Macri abandona Juntos por el Cambio. El ex presidente participó de un Zoom en el que se decidió dar a luz un duro documento en referencia a la modificación de la justicia federal y participará el lunes 10 de de agosto de otra cumbre, por el mismo medio. No se puede saber si es mediocridad, operación de prensa, o un atraso de comprensión de la época, de esta era digital. Impresiona la distancia de los legisladores de la era tecnológica que vivimos.
Triunfo e interrogantes. El acuerdo logrado en la legislatura bonaerense entre Juntos por el Cambio y el gobierno de Axel Kicillof significa para Mar del Plata trescientos millones de pesos en los meses de agosto y septiembre. Cien millones de libre disponibilidad, y doscientos millones para obras. Tal como están las cosas, el dinero fresco permitirá mantener los pactos de la administración con el sindicato, nombramientos, horas extras truchas y, quizá, alguna obra. Pero para hacer obras, hay que tener planes previstos. Y de eso, no hay nada de nada.